"Las minimizaciones en Fuerza Popular para explicar su caída a 14% de aprobación no son nada convincentes. La dirigente más bien parece dispuesta a llevar esa cruz en silencio, esperando que pase la tormenta de los audios".,Pedro Chávarry. Parece convencido de que lo peor ha pasado, es decir que no habrá nuevos destapes y que las críticas se van a disipar. Convencido también de que la mayoría del Congreso lo apoyará en toda circunstancia. ¿Tiene razón? Por lo pronto ha puesto en marcha una guerra contra colegas y medios de prensa, guerra que probablemente llevará a una división del sistema judicial. Keiko Fujimori. Las minimizaciones en Fuerza Popular para explicar su caída a 14% de aprobación no son nada convincentes. La dirigente más bien parece dispuesta a llevar esa cruz en silencio, esperando que pase la tormenta de los audios. ¿Está superado el problema Kenji? Un regreso de Alberto Fujimori a prisión, incluso una prisión suspendida, sería un golpe adicional. Carlos Oliva. Mantiene perfil bajo, a pesar de que hay pronósticos económicos muy buenos para los próximos dos años. El BCR da 4% de crecimiento del PBI para este año. Los estudios de los bancos son un poco menos optimistas, pero no bajan de 3.6%, y se acercan al 4% para el próximo año. Falta ver ahora qué de interesante se hará con todo ese alivio. Daniel Salaverry. Comienza con un fuerte hándicap de desaprobación, que podría revertir. Dos tareas centrales: llevar buenas relaciones con el Ejecutivo, todo lo que se pueda, y mantener el orden en un Congreso que parece cada vez más indisciplinado. Lo primero significa no bloquear. Lo segundo exige salirle al paso de las voces más disociadoras, de cualquier bancada. Martín Vizcarra. Su discurso del pasado 28 le sigue sirviendo, y sus seguidores lo consideran bien afianzado en la presidencia. Sin embargo sigue la presión de una demanda por logros. El más próximo: concretar el referendo (que va a tener que negociar). El de más peso: mostrar algunos avances de reconstrucción en el norte, antes de que llegue el próximo Niño costero, una posibilidad al 40%. El candidato local. Como en pasadas elecciones sus opciones ahora en octubre serán óptimas. Pero con la gresca en Lima, ahora más, y mejor todavía si es algo moderado. El mejor argumento electoral va a ser una vuelta a los antiguos grados de anti-limeñismo, encarnados por los membretes partidarios considerados nacionales.