Daniel Mora Zevallos Excongresista de la República. Impulsor de la Nueva Ley Universitaria A lo largo de la historia nuestra universidad no ha tenido mayor incidencia en el crecimiento y el desarrollo del país, ha sido una universidad mediocre, politizada, burocrática, indiferente, mercantilista, fabricante de títulos y profesionales. Los gobiernos sucesivos no han mirado a la universidad como factor fundamental para el desarrollo, con tremenda ceguera la han visto como un problema de carácter político que siempre trató de eludir. La autorregulación no funcionó, la tristemente célebre ANR (Asamblea Nacional de Rectores) y la famosa CONAFU solo fueron fuente de una gran corrupción. Existen grupos enquistados en los órganos de gobierno que mercantilizaron la educación viéndola solo como un objeto, un bien a vender, sin importar la clase de profesional que egresaba, si le servía o no a él a su localidad, región o al país, el Perú nunca les importó. Al cabo de tres años de promulgada la Ley N° 30220 (Nueva Ley Universitaria), podemos ver que en el país ya se habla de calidad de la educación, que el estudiante, los padres de familia, los docentes, los administrativos hablan y exijan calidad y le den la real importancia que tiene para el país, y su inserción en el mercado laboral. La SUNEDU ha encontrado universidades con más de 400 establecimientos no autorizados, más de 100 programas o carreras no autorizados, más de 80 mil estudiantes afectados, con publicidad engañosa contraria a la ley en medios de comunicación, son apenas 13 las universidades con licencia institucional de 142, lo que era de esperarse a la luz de la situación calamitosa en que se encontraban. Es cierto, desearíamos un mayor avance, romper la inercia es difícil, pero una vez que el coche empiece a andar alcanzará en el tiempo su velocidad constante en beneficio del Perú y de todos los peruanos.