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Los Ángeles, una de las ciudades más famosas del mundo, fue fundada por 44 pobladores de Sinaloa y Sonora: cómo surgió la gran metrópoli

La influencia de estas primeras familias es evidente en el nombre de calles y barrios, así como en las costumbres locales, resaltando la conexión histórica entre México y Los Ángeles en la vida contemporánea.

Los Ángeles es la segunda ciudad con mayor población mexicana en EE. UU. Foto: Pelago
Los Ángeles es la segunda ciudad con mayor población mexicana en EE. UU. Foto: Pelago

Los Ángeles, famosa por su industria cinematográfica, su diversidad cultural y su economía floreciente, es una metrópoli que ha sido forjada por la influencia de diversos grupos. Sin embargo, pocos conocen el vínculo histórico que existe entre esta ciudad y las provincias mexicanas de Sonora y Sinaloa. Su fundación en 1781, bajo el liderazgo de Felipe de Neve, estuvo marcada por la participación activa de mexicanos de estas dos regiones.

El grupo fundacional fue compuesto por 44 pobladores, entre ellos hombres, mujeres y niños. Estos pioneros llegaron en su mayoría desde lo que en ese entonces era el Virreinato de la Nueva España, y se establecieron en lo que hoy es el corazón de Los Ángeles. Esta expedición no solo fue una iniciativa para poblar el área, sino también un ejemplo de la presencia temprana de la cultura mexicana en lo que hoy es EE. UU.

¿Cómo contribuyeron las familias de Sinaloa y Sonora a la fundación de Los Ángeles?

El grupo original que fundó Los Ángeles estaba compuesto por una mezcla diversa de orígenes. Entre los miembros se encontraban españoles, mestizos, mulatos y criollos, lo que reflejaba la rica diversidad étnica de la época. Entre los pioneros destacó la familia Mesa, originaria de Álamos, Sonora, quienes se establecieron en la nueva colonia, contribuyendo a su crecimiento.

La familia Mesa, formada por Antonio de Mesa, su esposa María Gertrudis López y sus hijos, dejó una huella en la historia de la ciudad. A pesar de que inicialmente se asentaron en Los Ángeles, la familia regresó a su tierra natal en Sonora poco después de su llegada. Aunque algunos registros mencionan que Antonio de Mesa trabajaba en las minas de plata, investigaciones recientes sugieren que su empleo era como sirviente en casas de familias adineradas en Álamos, lo que demuestra la movilidad social que muchos de los colonos experimentaron.

El legado de las primeras familias de Los Ángeles en la cultura californiana

A pesar de su partida, la influencia de los primeros pobladores de Los Ángeles sigue siendo evidente. Los nombres de las calles, los barrios y las costumbres locales son testigos de la contribución que tanto Sinaloa como Sonora hicieron al desarrollo de la ciudad. Esta fusión de tradiciones mexicanas con la naciente cultura californiana ha perdurado a lo largo de los siglos, y sigue siendo un componente esencial de la identidad de la ciudad.

Hoy, Los Ángeles es la segunda ciudad con mayor población mexicana en EE. UU., lo que es testimonio de la influencia de estos primeros colonos. Zonas como la Calle Olvera, que preserva gran parte de la historia de la ciudad, son lugares de encuentro cultural y social, celebrando la rica herencia de aquellos primeros pobladores.

¿Por qué es importante reconocer este vínculo histórico entre México y Los Ángeles?

El reconocimiento de la influencia de los pobladores de Sonora y Sinaloa en la fundación de Los Ángeles no solo sirve para comprender la historia de la ciudad, sino también para destacar la profunda relación entre México y la región. El mestizaje y las tradiciones de estos primeros fundadores ayudaron a dar forma a lo que ahora es una de las ciudades más emblemáticas y diversas del mundo.

El legado de estos inmigrantes no solo está presente en la arquitectura o los nombres de los lugares, sino también en la vida cotidiana de los angelinos, que continúan celebrando su historia común con México. Esta rica herencia, que une a Los Ángeles con México, sigue siendo una de las principales características que definen la ciudad.