¿Volverán los días fríos en Lima? Senamhi aclara
Mundo

Alarma por variante Delta: cómo el coronavirus resurgió en Wuhan 14 meses después de desaparecido

Este último foco de contagio es importante, ya que abarca más de una docena de provincias y también Pekín, la capital china. Las autoridades han decidido testear de urgencia a todos los habitantes.

Wuhan, la ciudad china donde surgió en diciembre de 2019 la pandemia de coronavirus, registra un nuevo brote de casos de COVID-19, por lo cual, las autoridades decidieron testear a todos los habitantes. Hacía más de un año que el virus había desaparecido de las calles de Wuhan, una ciudad de 11 millones de habitantes.

El pasado lunes 2 de agosto se confirmaron tres nuevos casos de contagios por un brote de la variante Delta, el cual apareció el mes pasado en el este del país. Los últimos casos registrados en la ciudad remontaban a mayo de 2020.

Este resurgimiento supone un duro golpe para Wuhan, que fue la primera ciudad del mundo sometida a cuarentena por la COVID-19, a partir del 23 de enero de 2020 y durante 76 días.

Tras haber derrotado al virus, sus habitantes se enorgullecían de vivir en “la ciudad más segura del mundo”, en comparación con los efectos de la pandemia que causó la muerte de más de 4 millones de personas en el planeta.

La ciudad a orillas del río Yangtsé está “lanzando rápidamente pruebas PCR a todos sus residentes”, dijo a periodistas Li Tao, un alto cargo local, en una conferencia de prensa. Los contagios fueron detectados en siete trabajadores migrantes en la ciudad, de los cuales cuatro no presentaban síntomas de la enfermedad.

Todo el arsenal

China, que prácticamente erradicó la epidemia en la primavera de 2020, registra desde hace unas semanas un resurgimiento del virus, el más amplio desde el año pasado. Con más de 400 contagios desde mediados de julio, este aumento de la contaminación sigue siendo, sin embargo, muy limitado en comparación con las cifras registradas en otros países.

Pero este último foco de contagio es importante en términos de extensión geográfica, ya que abarca más de una docena de provincias y también Pekín, la capital, que el domingo instó a sus habitantes a no salir de la ciudad, salvo por razón de fuerza mayor.

Ante el riesgo de una reactivación de la epidemia, el gobierno recurre al arsenal de medidas radicales que utilizó a comienzos de 2020: confinamiento, limitación de los desplazamientos, testeo masivo.

Este martes, China anunció 61 contagios locales, con un brote de la variante Delta, de rápida propagación, que alcanzó a decenas de ciudades luego de una serie de infecciones entre trabajadores del aeropuerto de Nanjing (este).

La población de esta ciudad de nueve millones de habitantes ya fue testeada en dos ocasiones y actualmente hay una tercera campaña en curso. La ciudad oriental de Yangzhou, de 1.3 millones de habitantes, cerca de Nanjing, ordenó a sus residentes permanecer en casa luego de que se detectaran 40 nuevos contagios en un día.

Sólo una persona por hogar puede salir una vez al día para hacer las compras. El anuncio se produjo luego de que la localidad turística de Zhangjiajie, en la provincia central de Hunan, así como la vecina Zhuzhou, emitiera órdenes similares en los últimos días, las cuales afectan a más de dos millones de personas en conjunto.

Las autoridades admitieron que entre las personas contagiadas hay muchas que habían sido vacunadas, lo que genera temores sobre la eficacia de las vacunas chinas, las únicas disponibles en el gigante asiático.

Desde el año pasado, China distribuyó más de 1.650 millones de dosis de vacunas contra la COVID-19.

Los artículos firmados por La República son redactados por nuestro equipo de periodistas. Estas publicaciones son revisadas por nuestros editores para asegurar que cada contenido cumpla con nuestra línea editorial y sea relevante para nuestras audiencias.