¿Quién fue la tatarabuela de Johanna San Miguel?: conoce a la filántropa peruana que luchó por la niñez y tiene un monumento en su nombre
Su dedicación a los niños y su compromiso social la convirtieron en un referente de la beneficencia en el país.
La reconocida conductora y actriz de televisión Johanna San Miguel es conocida por su trayectoria en la pantalla chica; sin embargo, también destaca por su ascendencia familiar. Juana Alarco, su tatarabuela, fue pionera en la creación de instituciones que apoyaron a los más vulnerables, especialmente a los niños huérfanos y necesitados.
El Colegio Nacional Juana Alarco de Dammert, ubicado en el distrito de Miraflores, lleva su nombre en honor a la gran filántropa peruana. Foto: UGEL 07
¿Quién fue Juana Alarco de Dammert?
Juana Alarco de Dammert nació en 1842 en Lima, Perú, bajo el nombre de Juana Alarco Espinoza. A los 19 años, contrajo matrimonio con Juan Luis Dammert Amsink, un comerciante alemán. La trágica pérdida de su primer hijo a los 21 años marcó un punto de inflexión en su vida y la llevó a dedicar su tiempo y recursos a causas sociales que beneficiaban a las madres y a los niños en situación de vulnerabilidad.
Además, dejó una huella imborrable en la historia del Perú a través de su labor filantrópica. Dedicó su vida a causas sociales y al bienestar de los más necesitados. Su incansable trabajo en la educación, la atención a la infancia y su compromiso con las comunidades marginadas la convierten en una figura clave en el desarrollo social del país. Su legado de solidaridad y generosidad perdura hasta el día de hoy.
¿Qué otras obras benéficas hizo Juana Alarco de Dammert?
La labor de Juana Alarco de Dammert se intensificó tras la guerra civil de 1895, cuando organizó la atención a más de 200 heridos en la capital. Posteriormente, se enfocó en ayudar a los niños huérfanos y convocó a las damas de Lima para fundar la Sociedad Auxiliadora de la Infancia. En 1896, estableció la Escuela Maternal, que ofrecía alimentación y educación a niños de 7 a 12 años, además de un consultorio de atención gratuita.
En 1900, Juana realizó la primera kermés benéfica para financiar sus obras sociales. En 1902, fundó la primera cuna maternal en Barrios Altos, lo que permitió que más mujeres trabajaran mientras sus hijos estaban bajo cuidado. Su visión y esfuerzo fueron fundamentales para la creación de programas que hoy son esenciales en el sistema educativo peruano.
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Un legado que transformó el bienestar de las futuras generaciones peruanas.
Juana Alarco de Dammert también fue pionera en la distribución de leche en escuelas fiscales, lo que sentó las bases para los desayunos escolares en colegios públicos. Su incansable lucha por la salud infantil culminó con la inauguración del Hospital del Niño en 1927, un hito en la atención médica para los más pequeños del país.
El reconocimiento que se ha ganado por su arduo labor por la sociedad
Tras una vida dedicada a la beneficencia y con siete hijos como legado, Juana Alarco de Dammert falleció a los 90 años. Su contribución a la sociedad peruana se recuerda a través de un colegio que lleva su nombre y de un monumento en la Escuela de Artes y Oficios, que rinde homenaje a su labor en favor de los niños.
La opinión de Johanna San Miguel sobre su tatarabuela
Johanna San Miguel ha expresado en diversas ocasiones su admiración por Juana Alarco de Dammert, a quien describe como "una mujer decidida" que enfrentó grandes desafíos en su época. En una entrevista, la actriz reflexionó sobre las dificultades que vivió su tatarabuela y destacó la relevancia de su legado en la actualidad.
