Mauricio Fernandini. Presenta un festival de marinera con el que quiere “unir” a los peruanos. De otro lado, habla de la igualdad y de la coyuntura. “Los audios han puesto el hartazgo del ciudadano”.,El periodista y campeón de marinera organiza “El imperio de los pañuelos”, un festival con el que piensa unir “a todas las sangres”. Mauricio Fernandini tiene como modelos el festival de salsa de Cali y los festivales de tango en Argentina. También contará con la banda del Ejército. De otro lado, mira con optimismo la coyuntura y bromea con la idea de estar en un reality. “Espero que Ricardo Morán me llame a mí y a mi novio para bailar”. ¿Por qué un campeón de marinera hace un festival? ‘20 lucas’ fue una obligación feliz, para descubrir la periferia de la ciudad, la entraña de Lima. La capital de todas las sangres necesitaba -me parece- un festival que nos convoque a todos, amantes de la marinera, de las tradiciones en general. Ese es un poco el espíritu del festival. PUEDES VER "Marinera para Todos" llevó algarabía a la Plaza de Armas de Trujillo [VIDEO] ¿Entonces, ningún peruano debería perdonarse no bailar marinera? ¡Claro, porque es un sentimiento! Es disfrutar el orgullo de tu origen. No es posible que nos esté ganando el oscurantismo, la envidia, la codicia. Cada vez me siento más cercado por un universo negativo. Cuando miro mis raíces digo: ¿por qué si tengo folclor, historia, todo? ¿Cuál es la reacción de los que te siguen por ‘20 Lucas’? ‘20 Lucas’ me conectó con un segmento de la población que no venía siendo escuchado, porque hay una tendencia facilista al sensacionalismo, a la noticia escabrosa. Me ha tocado recorrer a pie Lima y no encuentro discriminación, encuentro hermandad, respeto. Me siento muy querido y sincero. No estoy llegando con máscaras . Claro, eras de los pocos que visibilizó su orientación. Para mí es imperiosamente necesario reafirmar las veces que se pueda, porque se tiene miedo de lo malo, y amar nunca es malo. Nunca lo bueno se esconde, y yo no tenía por qué esconderme y tampoco tenía por qué volverme un fanático exhibicionista y darme de besos en la Catedral, eso me parece inoportuno. ¿Por qué? Porque hay que tener elegancia para todo (sonríe). Entonces, era el momento de decirlo, el país estaba polarizado. ¿Aún es así? Espero que menos, siendo un estado laico, ¿no? Yo me he educado en colegios católicos y me siento tan cerca de Dios como ellos. No me siento menos. Y el camino de vivir en paz no solo te lo marca la Biblia o lo que ellos interpretan. A mí que me juzguen por mis actos. He amado profundamente y he sido afortunado. Pero todavía hay estereotipos sobre lo femenino-masculino y homofobia. Hace poco insultaron a un actor del musical Billy Elliot. Sí, pero cuando tienes la condición genética de amar a la gente de tu mismo sexo, vas a morir así, no hay otro camino. Y si tú naces heterosexual, ¡así bailes “El lago de los cisnes”, vas a morir heterosexual! Por favor, padres de familia, dejen de mandar a sus hijos al Leoncio Prado. Aquí me tienes, a mis 52 años, persiguiendo obsesivamente la felicidad y un universo laboral que me haga sentir bien, quiero un espacio para aplaudirnos entre peruanos. ¿A pesar de los audios? Yo soy muy romántico y tengo la convicción que vamos a ganar los buenos e íntegros. Los audios han puesto el hartazgo del ciudadano de pie, y no vamos a permitir que siga un juez que se toma la licencia de intentar indultar a un violador. Ahí se acaba lo que pueda tener de prudencia y me encadeno donde tenga que encadenarme, pero no vamos a dejar que César Hinostroza siga libre. Cuando los peruanos decidimos con una marcha acabar con la dictadura, lo logramos. (E.B.)