Economía

Petroperú inicia recuperación, pese a que gobierno no define directorio

La demora en la designación del directorio de Petroperú continúa. Mientras tanto, la petrolera alcanzó el 30% de la cuota del mercado. Su reflote financiero podría apuntar hasta ese 53% que tuvo en el 2004, señala especialista. 

Luego de la renuncia del último directorio de Petroperú, el gobierno no ha logrado un consenso para elegir a los nuevos miembros. Foto: difusión
Luego de la renuncia del último directorio de Petroperú, el gobierno no ha logrado un consenso para elegir a los nuevos miembros. Foto: difusión

Ha transcurrido casi un mes desde que renunció el Directorio de Petroperú liderado por Oliver Stark y hasta el momento, no existe certeza sobre sus nuevos integrantes. Pese a que el ministro de Economía (MEF), José Arista, había asegurado que el fin de semana pasado se definiría este tema, esto no ha ocurrido.

Si bien existen otras prioridades en la agenda gubernamental como el paro de los transportistas, resulta al menos preocupante, como señala el expresidente de Perupetro, Aurelio Ochoa, que todavía no se conforme el nuevo directorio de la petrolera estatal. “No es que haya disponibilidad absoluta de personas que se hagan cargo. Entonces, existe esa limitante dada la coyuntura nacional. Sin embargo, hay que acotar que la empresa sigue marchando”, declaró a este medio.

Una de las principales cartas para asumir la presidencia de Petroperú es Alejandro Narváez, expresidente de la empresa pública durante el periodo 2003-2005. Sin embargo, su designación no ha encontrado el consenso respectivo para hacerse oficial. Fuentes de este diario refieren que el candidato propuesto por el Ministerio de Energía y Minas (MINEM) y avalado por la presidenta Dina Boluarte, requiere tener una mayoría en el directorio para hacer viables sus decisiones.

Y es que según el artículo 47 del Estatuto de Petroperú, esta instancia de dirección está compuesta por 6 miembros:3 de ellos designados por el MEF, 2 por el MINEM y 1 por los trabajadores. En un primer momento, el ministro Arista había señalado que los tres directores renunciantes estarían dispuestos a quedarse. Sin embargo, esta posibilidad parece remota con la presencia de Narváez.

Mientras la indefinición del MEF, en su calidad de accionista mayoritario, continúa, los pronunciamientos de los trabajadores y ciudadanos se han dado a conocer. Los primeros exigen un directorio con experiencia y capacidad. En el caso de los miembros de la sociedad civil, ellos consideran que esta es una “oportunidad para salir del ciclo de apropiación, de malversación del patrimonio y de los recursos públicos”.

Cifras en azul

En la última conferencia de prensa del Consejo de Ministros, José Arista destacó que la producción de la Nueva Refinería de Talará (NRT) alcanzó cerca de 80.000 barriles diarios de petróleo, con expectativas de llegar al pico de 95.000 para diciembre. Dicho incremento será fundamental para que Petroperú logre cubrir sus deudas en el plazo de cuatro a seis años. En pocas palabras, no estaríamos frente a un “elefante blanco”, como afirman sus detractores.

“Durante la ausencia del directorio renunciante, Petroperú ha incrementado de 25% a 30% la cuota de mercado. Esta es la demostración que es viable y gracias al DU, se ha permitido la viabilización financiera de la empresa, así como el redireccionamiento de sus cifras. Si va a este ritmo con el pleno funcionamiento de la refinería, recuperará ese 50% o 53% de mercado que tuvo en su momento”, analizó Ochoa.

De igual forma, recordó que desde agosto ya está funcionando la Unidad de Flexicoking de la NRT, lo cual contribuirá a mantener de manera permanente las cifras en azul. A esto, hay que sumarle que el margen de refino se ha elevado de US$10 por barril a US$21, indicador auspicioso para su reflote financiero.

Aún queda pendiente encaminar el proceso de su reestructuración que estará a cargo de una firma especializada. Especialistas consultados por este diario, indican que la recuperación económica de la petrolera demuestra que no es un “barril sin fondo” y que el próximo directorio tendrá el desafío de garantizar una gestión corporativa que sea sostenible.