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Cristal fuera de la Libertadores: las claves de la eliminación y su obligación de ganar la Liga 1

Ni el poderío ofensivo de Martín Cauteruccio le sirvió a los rimenses para clasificar a la fase 3 del torneo. Ahora, no tienen excusas para no campeonar en el fútbol peruano.

Sporting Cristal no pudo repetir la clasificación a fase de grupo de la Libertadores que había logrado en el 2023. Foto: Luis Jiménez/GLR
Sporting Cristal no pudo repetir la clasificación a fase de grupo de la Libertadores que había logrado en el 2023. Foto: Luis Jiménez/GLR

La historia se mostró implacable con Sporting Cristal. Los registros de la Copa Libertadores dictaban que ningún equipo había remontado una llave de eliminación directa en el torneo tras empezar perdiendo por cinco goles de diferencia. Always Ready no quiso ser la excepción a la regla y, pese a que cayó en Lima, la abultada ventaja que sacó en la ida le bastó para celebrar el pase a la fase 3 y dejar a los celestes masticando una amarga eliminación.

La tarea era titánica, pero el espectacular presente del delantero Martín Cauteruccio hacía que la esperanza se mantuviera en el corazón de los hinchas cerveceros. El insaciable goleador uruguayo no quiso decepcionar a la afición, pues se lució con un hat-trick para el 3-1 que le permitió a los dirigidos por Enderson Moreira salvar el honor en casa. Su esfuerzo, sin embargo, no fue suficiente para igualar el marcador global, que terminó 7-4 a favor de los bolivianos.

Las claves de la eliminación de Sporting Cristal

Decir que Cristal perdió la serie en Bolivia no es ninguna novedad. Los más de 4.000 m. s. n. m. de El Alto ahogaron a los rimenses en el primer encuentro (sobre todo durante el segundo tiempo) y propiciaron un inédito 6-1 en contra que, para colmo de males, se vio coronado con la expulsión de sus dos zagueros centrales titulares (Ignácio da Silva y Leonardo Díaz), quienes fueron bajas sensibles para la vuelta.

En el duelo de revancha, Moreira se arriesgó con la inclusión de Irven Ávila para acompañar a 'Caute', pero el aporte del 'Cholito' fue prácticamente nulo. De hecho, de la falta cometida por él nació el tiro libre que derivó en el gol de la visita (responsabilidad compartida entre la barrera y el portero Renato Solís) para terminar de derrumbar toda ilusión.

Este es precisamente uno de los problemas que más resaltan en el elenco de La Florida: lo difícil que le resulta mantener su arco en cero. En siete partidos jugados este año, solo una vez pudo terminar los 90 minutos sin recibir tantos. Contra Always Ready, esta falencia resultó ser fatal.

Otro aspecto en el que no acertó el DT fue en su planteamiento para afrontar los dos juegos de la serie. En la altura de Bolivia experimentó con un esquema inusual que le valió irse goleado. Ya en Lima, tuvo que ensayar en la zaga central, que fue la zona más floja del campo, aunque bien valía la pena el riesgo para apostar todo al ataque.

Sin embargo, Joao Grimaldo, que tantas veces había sido vital para Cristal, no derrochó la misma magia en este partido y generó poco peligro. Santiago González tampoco destacó y Yoshimar Yotún, en el mediocampo, apenas se mostró cumplidor.

Los cambios tampoco fueron solución, por más que sirvieron para dar un leve aire fresco, como el ingreso de Pretell, y evidenciaron el otro gran problema que los hinchas han señalado hasta el cansancio: la falta de una banca que esté verdaderamente a la altura de los titulares y pueda resolver situaciones difíciles cuando se requiera.

Always Ready hizo lo justo en el segundo partido contra Cristal, consciente de su gran ventaja en la ida. Foto: Luis Jiménez/GLR

Always Ready hizo lo justo en el segundo partido contra Cristal, consciente de su gran ventaja en la ida. Foto: Luis Jiménez/GLR

Por último, tampoco debe pasarse por alto la inteligencia de Always Ready para afrontar esta llave: no arriesgó más de la cuenta (pues no lo necesitaba), aprovechó al máximo las oportunidades que se le presentaron y no tuvo reparos en replegarse cuando debía hacerlo. El premio a su esfuerzo fue una más que merecida clasificación a la siguiente ronda.

Cristal obligado a ganar la Liga 1 para reivindicarse

Despojado de toda opción de seguir compitiendo a nivel internacional, a Sporting Cristal solo le queda un camino para terminar bien el año: campeonar en la Liga 1. Ya no habrá excusas de tener que afrontar dos torneos al mismo tiempo, por lo que su prioridad será exclusivamente el campeonato local.

Además, ahora tiene al '9' que durante todos los años desde su último título (2020) habían reclamado los hinchas: un delantero que, con sus 17 goles en apenas siete cotejos disputados en lo que va del año, ha sobrepasado todas las expectativas y despierta la admiración de la prensa mundial.

Cristal también contará con la 'ventaja' de que tanto Alianza Lima como Universitario, dos de sus máximos competidores, jugarán la fase de grupos de la Libertadores, por lo que, en teoría, sufrirán un desgaste mayor. De lo que suceda en sus enfrentamientos directos contra los 'compadres' dependerá en gran parte sus chances de campeonar.

Con este panorama, el primer reto para los de La Florida será asegurar el Torneo Apertura, en el cual marchan punteros e invictos. Luego, a mediados de año, el club podría hacer uso del sexto cupo para extranjeros que se reservó en caso de necesidad, todo con la finalidad de alzar su estrella 21 al final de la temporada. Solo así podrá reivindicarse de un 2024 que empezó con este duro revés.