Deportes

Perú vs. Argentina: retar a los números es una obligación

La tabla de clasificación rumbo al torneo mundialista no llega a evidenciar los puntos de fe que la nación le tiene al partido de hoy.

Argentina y Perú se enfrentan hoy en un partido por las Eliminatorias Qatar 2022. Foto: composición LR / Gerson Cardoso
Argentina y Perú se enfrentan hoy en un partido por las Eliminatorias Qatar 2022. Foto: composición LR / Gerson Cardoso

Desafiar, un término tan provocador como popular, sobre todo en las Eliminatorias Qatar 2022, recibe en el diccionario de la RAE una acepción con tintes blanquirrojos: contender, competir con alguien en cosas que requieren fuerza, agilidad o destreza. La selección peruana posee cada una de estas condiciones, y aunque luego de caer ante Bolivia las posibilidades sean mínimas, la tarea que está escrita no en la camiseta pero sí en el ideario nacional es sumar puntos para acercarse al tan ansiado repechaje.

El duelo premundialista frente a Argentina se presenta como un reto casi utópico para los dirigidos por Gareca y, de paso, para todo el territorio nacional. La Albiceleste no solo ha logrado acumular 22 puntos tras las 10 primeras fechas, sino que además ha sumado a su historial 24 partidos sin perder, la mayor racha desde julio de 2019. Pero como el “casi” trae una cuota de promesa adherida a sus cuatro letras y a la historia del Perú —”Nuestros brazos, hasta hoy desarmados, / estén siempre cebando el cañón”, se entona en el himno nacional—, el cuadro patrio tiene todavía la posibilidad de pelear hasta el final en la cancha del Monumental de Núñez.

Pero el desafío no es un balón que solo está en el lado peruano, ya que para la selección argentina también se trata de un encuentro con marcadores por romper: Lionel Messi, el crack del fútbol, hasta ahora no ha logrado anotar un solo gol frente a Perú en algún proceso de índole mundialista. Por su lado, fundido en su rol como entrenador de la selección nacional, el ‘Tigre’ Gareca no ha celebrado un triunfo frente a la Albiceleste, el único país sudamericano como rival pendiente. Por tanto, es un partido histórico a nivel de puntuaciones y, probablemente, también de egos.

El duelo de esta noche, convertido ya en un reto numérico para la trayectoria de Messi y para la de Gareca, también le recuerda al público que el deporte es uno de los asuntos más democráticos. Esa lucha de poder que ahora parece compartida podría resultar un impulso para los jugadores y un ápice más de fe para los fanáticos, quienes han vivido, encuentro tras encuentro, las letras de una melodía que ahora es un segundo himno: Porque yo creo en ti, ¡vamos, vamos, Perú! / porque yo creo en ti, ¡vamos, vamos, Perú!