¿Los incas llegaron a Oceanía? Tupac Yupanqui conquistó más que Alejandro Magno, según teoría
Poco se sabe de esta probable odisea que habría realizado uno de los expansionistas más destacados del imperio del Tahuantinsuyo. Conoce aquí todos los indicios sobre la llegada de los incas a la Polinesia.
El imperio incaico, también llamado Tahuantinsuyo, es uno de los que más expansión territorial alcanzó en toda la historia. Pese a que el alcance total de este todavía es desconocido, existe una teoría que indica que los incas habrían llegado hasta Oceanía, precisamente a la actual Isla de Pascua.
El que postuló dicha posibilidad fue el historiador peruano José Antonio del Busto, destacado investigador del siglo XX que incluso viajó a la Polinesia en la década de los 60.
¿Quién fue Túpac Yupanqui?
A finales del siglo XV, mientras en Europa se preparaban las expediciones de Cristóbal Colón, en América del Sur gobernaba el joven inca Túpac Yupanqui, sucesor del inca Pachacútec, quien mandó a construir Machu Picchu.
Este joven dirigente realizó, quizá, la mayor expansión de cualquier imperio en la América precolombina. Bajo su mando, el Tahuantinsuyo se extendió desde Quito (Ecuador) hasta el río Maule (Chile).
Las conquistas de Túpac Yupanqui
Por el este, Túpac Yupanqui se detuvo en el Paititi, probablemente por lo densa de la selva amazónica y las pocas razones estratégicas para conquistarla; sin embargo, la incógnita mayor se encuentra al lado opuesto, en el Océano Pacífico.
¿Llegaron los incas a descubrir Oceanía?
Existen algunas teorías que señalan que Túpac Yupanqui llegó a algunas islas de la Polinesia, hacia donde enrumbó cuando apenas tenía 25 años.
Al igual que con otras expediciones, la intención del inca habría sido encontrar oro, provisiones y demás elementos que sirvan para el imperio.
Si bien los incas nunca tuvieron una fuerza naval importante –ya que no era necesaria–, se dice que Túpac Yupanqui conoció el mar cuando llegó a Guayaquil en medio de sus conquistas.
Fue por entonces que, comprendiendo las corrientes oceánicas, se le habría ocurrido la idea de llegar a otros territorios aprovechándolas, así como las balsas que había conocido de los lugareños.
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La expedición de Túpac Yupanqui
La teoría más extendida es la de José Antonio del Busto, quien viajó a algunas islas de la Polinesia en 1967.
En su obra, “Túpac Yupanqui: descubridor de Oceanía”, del Busto presenta 30 factores que indicarían que el inca fue el primero en llegar a las islas desde fuera.
Túpac Yupanqui vs. Alejandro Magno
Si bien la probable expedición de Túpac Yupanqui no fue con afanes de conquista, la extensión del territorio entre dichos viajes (desde las costas de América) serían mayores a los 8.000 kilómetros.
Lo que sí llegó a conquistar el inca fueron los territorios desde Quito al río Maule, es decir, alrededor de 4.000 kilómetros.
Por su parte, Alejandro Magno, recordado emperador de Macedonia, logró conquistar las tierras del Mediterráneo este, el Medio Oriente, Egipto y las partes occidentales de Asia. Su imperio se extendió desde Grecia hasta el río Indo, es decir, aproximadamente 3.900 kilómetros.
La leyenda del rey Tupa y Túpac Yupanqui
Entre los más destacados, está la existencia de una leyenda aún divulgada en la isla de Mangareva (y que también estaría presente en las islas Marquesas).
Esta cuenta la llegada del rey Tupa, quien habría llegado del este en una flota llamada pae pae, la cual sería nada menos que una balsa a vela, y de tipo ecuatorial, similar a las que Túpac Yupanqui había visto en Guayaquil.
Este personaje habría llegado a la isla con elementos que para entonces eran desconocidos en el lugar, como cerámica, textiles e incluso metales.
El templo de Vinapú
Otro de los indicios está ubicado en el templo de Vinapú, ubicado en la Isla de Pascua. Este santuario utiliza la técnica de piedras sobre piedra, tal cual lo hacían los antiguos incas.
Del Busto indica que cuando fue a la isla y postuló la posibilidad, los lugareños se mostraron reacios a aceptarlo, pues rechazaban la idea de que la construcción haya sido producto de extranjeros y no de ellos mismos.