UNI: ¿por qué esta universidad instauró los exámenes de admisión para aceptar a sus estudiantes?

Los exámenes de admisión a universidades públicas, como la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI), se convirtieron, con el paso del tiempo, en una verdadera tradición. Las evaluaciones que duran aproximadamente una semana se implantaron durante el siglo XX.

No hay duda de que esta universidad es un emblema dentro de las casas de estudios superiores estatales; ante ello, surge la interrogante de ¿por qué se instauraron los exámenes de admisión para aceptar a sus alumnos? Conócelo a continuación.

¿Por qué se instauraron los exámenes de admisión en la UNI?

Michel Fort, quien fue un destacado alumno, profesor y director de la UNI, estuvo entre los primeros en elevar su pedido respecto a la manera en la que los futuros ingenieros entraban a estudiar. Así, en 1912, Fort solicita que se haga una revisión de las condiciones de ingreso a la UNI. Por ese tiempo, Alejandro Guevara, también docente de la institución, planteó esta cuestión, pero por el sentido de que existían una sobrepoblación de estudiantes. Esta consideración no prosperó.

Uno de los argumentos principales para Fort, según el libro “Historia de la Universidad Nacional de Ingeniería”, en su segundo tomo, era que los estudiantes que ingresaban a esta institución tenían una deficiente formación secundaria. Por ejemplo, en los campos referidos a los estudios matemáticos y científicos. Este hecho, sumado a que algunos jóvenes no tenían criterio para elegir la profesión a seguir, tenía como consecuencia que no todos los alumnos que entraban al primer año podían continuar con sus cursos al siguiente año o lo repetían, principalmente por el nivel de la formación y la alta exigencia que conllevaba.

Asimismo, Fort también mostraba preocupaciones por la salud de los cachimbos, puesto que en los trabajos prácticos y los ejercicios militares del primer año de estudios había hechos verificados de las constantes enfermedades que la debilidad de algunos estudiantes les hacían padecer. Para ese entonces, ya se tenía información sobre ingenieros graduados que habían contraído dolorosas afecciones en sus labores de campo e, incluso, la muerte a raíz de ellas y de los accidentes a los que se encontraban expuestos.

No fue hasta 1919 en el que la tomó la resolución de establecer el examen de admisión como método de selección de sus futuros alumnos. De esta manera, la evaluación se tornó en una instancia de clasificación de los candidatos más aptos para los estudios dictados en la UNI, constituyéndose en el principal motivo para instituir dicho mecanismo.

¿En qué año se fundó la UNI?

La UNI fue fundada en 1876 por el ingeniero de origen polaco Eduardo de Habich, según información del portal oficial de dicha casa de estudios. En un principio, se denominó Escuela Especial de Construcción Civiles y de Minas del Perú, y popularmente se le conoció como Escuela de Ingenieros. Posteriormente, en 1955, cambió su nombre a Universidad Nacional de Ingeniería (UNI).

La historia de Eduardo de Habich, el fundador de la UNI

Eduardo de Habich tiene un lugar especial en la historia del Perú. Este matemático e ingeniero nacido en Polonia fue parte clave de la fundación de la Universidad Nacional de Ingeniería en 1876. Posteriormente, él se desempeñó como director de la institución y trabajó con dedicación para posicionar a la UNI como la principal casa de estudios superiores del Perú en la formación de ingenieros, arquitectos e investigadores.

¿Cuándo fundó Eduardo de Habich la UNI?

Tras el viaje a su continente, regresó a Perú para inaugurar una nueva institución dedicada a la ingeniería y a la enseñanza para los proyectos de construcción que luego realizaría el Estado.

Con ello, en 1876 se convirtió en uno de los fundadores de la Escuela Especial de Ingenieros de Construcción Civiles y Minas, que hoy en día se conoce como la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI) y de la cual fue su primer director.

En esa línea, Habich sería un ente fundamental para el crecimiento de la UNI, pues no solo le dio fines educativos a la universidad, sino que decidió usar ese espacio en otro aspecto para defender a nuestro país. Resulta que, durante la Guerra del Pacífico, las instalaciones de la Escuela pasaron a ser en un cuartel general de diversas operaciones internas.