El caso ‘Calígula’: el asesinato que lleva 30 años sin resolverse

Un 13 de febrero de 1992, Fernando de Romaña Azalde, alias ‘Calígula’, y su amigo Julio Domínguez Barsallo, ‘Chato’, fueron vistos por última vez con vida a las 7.00 p. m.. Horas después, el asesinato de ambos causaría revuelo en Lima y se convertiría en un crimen que hasta hoy sigue sin resolverse.

Transcurría los primeros años de la década de los 90, una época marcada por la lucha contra el terrorismo en nuestro país y también la llegada del narcotráfico a la capital. Con una Lima aún reducida, las fiestas sin desenfreno en las partes más exclusivas de la ciudad, el nombre de un tal Fernando ya era muy conocido en ese ámbito.

Con una ‘suerte’ para atraer a las féminas y manejando costosos vehículos, Fernando de Romaña Azalde, más conocido como ‘Loco’ o después de su muerte, como ‘Caligula’, se había convertido en todo un personaje de las noches limeñas. Sin embargo, su nombre no solo estaba involucrado en las listas de discotecas, pues la Policía lo venía siguiendo por presuntos delitos.

Primeros roces con la Policía

Fernando de Romaña, de 22 años, fue intervenido por la Policía por el presunto delito de robo de vehículos. Según reportaron diversos medios de aquel entonces, se pagó una coima de S/ 12.000 para que el joven pueda salir de la cárcel sin cargos en su contra. Tras ellos, los efectivos involucrados fueron dados de baja por sanciones administrativas. Lo más resaltante es que nunca se supo de dónde salió el dinero.

El día del crimen

El hermano de ‘Calígula’, Jorge de Romaña, reveló ante la Policía que ambos salieron de la casa de Miraflores a las 4.30 p. m., antes de que el Toyota plateado de placa LQ-3023 en el que circulaban sea interceptado por sus asesinos, de quienes, hasta hoy, no se saben sus identificaciones.

Horas después de lo ocurrido, la PNP ya había ubicado sus cuerpos. A ‘Calígula’ lo asesinaron de tres disparos en la cabeza. Su cuerpo fue abandonado en el kilómetro 17 de la carretera Huarochirí Cieneguilla. Su inseparable amigo, Julio Domínguez, alias ‘Chato’, murió de un tiro en el ojo izquierdo y fue hallado al lado del vehículo.

Hipótesis de su muerte

Para la Policía, un par de evidencias causaron el primer revuelo: fue un ajuste de cuentas, ya que ‘Calígula’ llevaba en su billetera 400 dólares y su reloj de lujo, ambas pertenencias intactas. Dos, el vehículo era alquilado. Había pagado S/ 80 diarios y una garantía de US$ 500 para poder manejar el carro que lo llevaría a su muerte.

Efectivos policiales encargados del “Caso Calígula” tejieron varios escenarios que explicarían la muerte de Fernando de Romaña. Una de ellos era que un ‘alto general’ habría mandado a matar al joven luego de que este último sea el amante de su esposa.

Otro hecho que se descubrió luego de la muerte de ‘Nando’, era que había un ‘Clan Calígula’ que operaba realizando desenfrenadas fiestas en las que habría orgías con personajes muy conocidos en ese entonces. Este grupo grababa las acciones sexuales para luego extorsionar a los individuos en mención.

Otro vínculo que tenía de Romaña, según fuentes policiales, era con el narcotráfico. Luego de una investigación policial, se pudo comprobar que Fernando no era vendedor de autos lujosos, tal cual como afirmaba la familia del fallecido. Entonces, ¿de dónde sacaba tanto dinero? De esa forma se comenzó a tejer dicha hipótesis.

Sin embargo, tras años de investigación inconclusa, lo único que se llegó a saber es que Fernando De Romaña Azalde ‘Calígula’ fue asesinado en febrero de 1992 de tres disparos en la frente. ¿Ajuste de cuentas, venganza por chantajes, tráfico de drogas u odio personal? Jamás se supo y quizá nunca se sabrá.

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