Cultural

“Hay temas por tocar”, una obra que busca la verdad

Giovanni Oviedo presenta “Hay temas por tocar”, una obra-concierto que, al ritmo del hip-hop y rap, pretende ayudarnos a analizar temas desde el amor, muerte, estereotipos, desesperanza y clasismo.

Giovanni Oviedo, director de la obra "Hay temas por tocar". Foto: captura de LR+
Giovanni Oviedo, director de la obra "Hay temas por tocar". Foto: captura de LR+

En “La entrevista”, Paola Ugaz conversó con Giovanni Oviedo, director de la obra “Hay temas por tocar”. La puesta en escena nos muestra la perspectiva de tres personajes y sus formas de entender, reproducir y tratar la verdad.

- El título ya dice bastante, pero, ¿cómo nace la obra “Hay temas por tocar”?

Los temas sobran, nos atraviesan a todos. Teníamos la idea de hacer “Hay temas por tocar”, tenemos una propuesta musical bastante fuerte; de ahí, sale la idea de ese juego de palabras de “Hay temas por tocar” con hay canciones que queremos mostrar.

- La danza y la música unida a un mensaje fuerte es mucho más potente que solo un guion actuado por actores. ¿Cuál es el reto de unir esto y que todo funcione bien?

Ha sido un reto el ensamble. Soy productor de una compañía bastante joven, tenemos tres años juntos. Escribir y dirigir esta obra suponía el reto de trabajar con actores en escena, cuatro músicos, dirección audiovisual. Hacer todo eso era un reto, pero lo tomamos con mucha valentía. También era un reto porque salíamos de pandemia, volvíamos al ejercicio, pero felices de lo que se está logrando.

- ¿Cuál fue la manera en que hiciste el guion para esta obra?

El hip-hop es una cultura amplía y también el rap viene a ser esa expresión artística musical que viene de la cultura del hip-hop. El proceso de escritura fue bastante interesante, fui escribiendo algunas canciones primero y luego las líneas de historia se iban dando.

Cuando ensayábamos, iba dándole algunas precisiones a la letra, también los músicos iban proponiendo algunas cosas más melódicas, armónicas. Ha sido un trabajo conjunto y ya luego pasé a mi tiempo frente a la computadora para darle sentido a esas letras.

La obra está escrita 100% en rima; es decir, de principio a fin está en rima. Ha sido bastante interesante para mí. Además de dedicarme al teatro soy rapero entonces ha sido un placer.

- ¿Cómo inicia la obra?

Desde que entras al teatro nos ves en escena, ya hay música, la experiencia es desde que cruzas la puerta. El primer texto es mío, les digo a la gente: “Buenas noches, bienvenidos a la transmisión donde la veracidad es la misión. Mi nombre es Moisés y tengo una información que podría cambiar el curso de esta nación. Tengo ilusión de un día decir algo así y que aquí se cambie el curso de todo el país, en un medio donde no necesita ni un medio de ti, pero si puedes, porfa’, colabora con un yape o un plin”, esas son las primeras barras de la obra.

- La Universidad de Lima inaugura su centro cultural con ustedes. Cuéntanos, ¿cómo fue esa experiencia creativa?

Inauguró su temporada de este año con una propuesta arriesgada. Cuando comenzamos a conversar, recién se estaba terminando de construir. Yo aprecio muchísimo la apuesta que tiene la universidad conmigo y con la compañía que soy parte. Lo agradecemos muchísimo. Nos han facilitado un montón. Para una compañía joven, entrar a una sala que tiene tantos recursos técnicos y tener a todo el equipo a la disposición ha sido un lujo y privilegio enorme poder crear teatro en esas condiciones.