¿Sabes por qué las estrellas parpadean en el cielo, pero los planetas no? Aquí te explicamos la razón
Desde la superficie de Marte, que cuenta con una atmósfera significativamente más delgada que la de la Tierra, este efecto no se produciría.
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Cuando miramos al cielo nocturno, es común observar que las estrellas parecen parpadear, mientras que los planetas brillan de manera constante. Este fenómeno ha intrigado a la humanidad durante siglos y tiene explicaciones científicas que involucran la atmósfera terrestre y la distancia de los astros. Las estrellas, aunque pueden ser muy brillantes, presentan un comportamiento intermitente en su luminosidad.
En contraste, los planetas visibles desde la Tierra, como Mercurio, Venus, Marte, Saturno y Júpiter, mantienen un brillo estable. La diferencia en el parpadeo de estos cuerpos celestes se relaciona con la forma en que la luz viaja a través de la atmósfera de nuestro planeta.
En el espacio, lejos de los efectos de la atmósfera terrestre, las estrellas emiten una luz estable y continua, sin mostrar el efecto de titilación. Foto: NASA.
La atmósfera terrestre, compuesta principalmente de nitrógeno y oxígeno, también contiene vapor de agua, dióxido de carbono y ozono. Esta capa de gases no es homogénea y experimenta cambios de presión y temperatura, lo que afecta la luz que proviene de las estrellas y los planetas.
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¿Por qué parpadean las estrellas?
La luz de las estrellas realiza un largo recorrido a través de la atmósfera terrestre antes de llegar a nuestros ojos, atravesando diferentes capas de aire que poseen densidades variables. Este proceso causa que la luz se refracte o se desvíe de su trayectoria original en múltiples direcciones. Como resultado, se produce el conocido efecto de centelleo, también llamado parpadeo estelar, que da la impresión de que las estrellas "titilan" en el cielo nocturno.
Este fenómeno, según la NASA, es especialmente evidente en las estrellas más alejadas de la Tierra. La distancia incrementa el impacto de las distorsiones atmosféricas debido a que la luz recorre mayores distancias y pasa por más capas de aire con diferentes temperaturas y densidades.
Estrellas captadas en fotografías espaciales. Foto: Astroaventura.
Los astrónomos han diseñado herramientas como telescopios con óptica adaptativa para contrarrestar estas distorsiones y obtener imágenes más claras del universo. Sin embargo, para los observadores casuales, el centelleo sigue siendo una característica encantadora que hace que las estrellas parezcan vivas en el vasto cielo nocturno.
La atmósfera de Marte y su efecto en la visibilidad
En comparación, Marte tiene una atmósfera mucho más delgada, con solo el 1% del grosor de la atmósfera terrestre. Esto significa que el efecto de refracción que causa el parpadeo de las estrellas no se produciría de la misma manera en el planeta rojo. Sin embargo, Marte enfrenta otros desafíos, como la abundante presencia de partículas de polvo, que también afectan la visibilidad.
¿Por qué los planetas no parpadean?
Los planetas visibles desde la Tierra no presentan el mismo parpadeo que las estrellas debido a su proximidad. Al estar más cerca, la luz que reflejan sus superficies se ve menos afectada por la refracción atmosférica. Esto les permite brillar de manera constante, a diferencia de las estrellas, que se encuentran a distancias mucho mayores.
Conjunciones planetarias y su visibilidad
En ocasiones, los planetas visibles se alinean en el cielo, creando espectáculos astronómicos impresionantes. Por ejemplo, en marzo de 2023, se observó una conjunción de Venus y Júpiter, un evento que atrajo la atención de astrónomos y entusiastas de la astronomía. Estos fenómenos son una oportunidad única para observar la belleza del cosmos y comprender mejor la dinámica de los cuerpos celestes.
En resumen, el parpadeo de las estrellas y la estabilidad de los planetas son fenómenos que se explican a través de la interacción de la luz con la atmósfera terrestre y la distancia de los astros. La ciencia detrás de estos eventos nos permite apreciar aún más la complejidad y belleza del universo que nos rodea.
