La NASA detecta en la Luna el impacto de un cohete desconocido
Ninguna agencia espacial ha identificado al cohete como suyo. La colisión ha dejado un cráter doble que resulta extraño para los científicos.
El Lunar Reconnaissance Orbiter (LRO), una sonda de la NASA, ha encontrado en la cara oculta de la Luna un extraño cráter formado por el impacto de un cohete cuyo origen no ha sido confirmado hasta el momento.
Este objeto espacial fue detectado por primera vez a fines del año pasado mientras seguía una órbita caótica entre la Tierra y la Luna. Por el tipo de brillo que reflejaba, los astrónomos determinaron que era un cohete.
Los estudios preliminares indicaban que era un cohete Falcon 9, de SpaceX, que puso en órbita un satélite meteorológico en el 2015. Luego se dijo que era un cohete Long March 3C, de China, que impulsó una misión no tripulada a la Luna ese mismo año. Sin embargo, ninguno lo reconoció como suyo.
Un “inesperado” cráter doble
Se estima que el objeto impactó el pasado 4 de marzo, pero como sucedió en la cara de la Luna que no es visible para nosotros, no se pudo observar el evento.
Ahora es confirmado con el reciente hallazgo del cráter gracias al orbitador lunar LRO.
No obstante, para sorpresa de los científicos, se trata de un cráter doble: uno oriental, de 18 metros de ancho, superpuesto a otro occidental, de 16 metros.
Imagen ampliada del cráter doble ocasionado por el impacto del objeto el 4 de marzo de 2022. Foto: NASA
“El cráter doble fue inesperado y puede indicar que el cuerpo del cohete tenía grandes masas en cada extremo”, señala un comunicado de la NASA.
La agencia espacial se refiere a que, por lo general, un cohete usado tiene su masa concentrada en extremo del motor, mientras que el resto de su cuerpo es básicamente un tanque de combustible vacío. Por tanto, al impactar, se produce una sola explosión.
En cambio, si su masa está en ambos extremos, lo más probable es que, al caer, produzca dos explosiones separadas.
A principios de los 70, los cohetes S-IVB de las misiones Apolo que llegaron a la Luna fueron estrellados a propósito para estudiar los efectos en la superficie. Pero ninguno de estos dejó un cráter doble, asegura la agencia espacial estadounidense.
Asimismo, sugiere que esta inusual característica dejada por el impacto del objeto desconocido podría ayudar a descubrir de dónde provino o a quienes perteneció.