La preservación de los juegos clásicos se ha convertido en una tarea cada vez más difícil en la era digital. Según un estudio reciente de la Video Game History Foundation, el 87% de estos se encuentra en peligro de desaparecer para siempre. Sin embargo, sorprendentemente, la piratería ha desempeñado un papel fundamental en la conservación de estos tesoros digitales, según el comunicado que compartieron.
La industria de los videojuegos ha evolucionado rápidamente y los avances tecnológicos han dejado atrás a muchos títulos retro y antiguos. A medida que el tiempo pasa, la disponibilidad de las copias físicas se reduce, lo que hace que estos sean aún más difíciles de encontrar. Es en este punto donde la piratería ha intervenido, aclara el documento, permitiendo que estos sean preservados y disfrutados por las generaciones futuras.
Aunque la piratería es un tema controvertido, especialmente desde el punto de vista legal, la conclusión de este estudio revela que no se puede negar que su impacto en la preservación de los juegos clásicos es por lo menos positivo. Gracias a la distribución ilegal de copias de estos títulos, muchos —que de otra manera habrían desaparecido— han logrado sobrevivir. El estudio muestra que la piratería ha actuado como un archivo digital, manteniendo viva la historia de los videojuegos y asegurando que las nuevas generaciones puedan experimentar los que marcaron época.
Es importante destacar que la preservación de clásicos también ha sido impulsada por el mercado de juegos en línea. Las tiendas digitales han permitido que un porcentaje limitado de estos estén disponibles de manera legal. Sin embargo, la oferta es insuficiente y no abarca la totalidad de la biblioteca de lo retro. Este vacío ha sido ocupado por la piratería, proporcionando acceso a aquellos que no están disponibles en las tiendas oficiales.
La falta de una legislación adecuada en cuanto a los derechos de autor ha dificultado aún más la preservación de los juegos clásicos. Las leyes obsoletas y los obstáculos legales han limitado la capacidad de conservar y compartir estas piezas históricas de software . Afortunadamente, el debate en torno a estas leyes ha ganado fuerza y se espera una revisión en el año 2024, lo que podría mejorar la situación y facilitar la conservación legal de los videojuegos retro.