El primer juego de Super Mario Bros, lanzado para la consola Nintendo Entertainment System (NES), celebra hoy su trigésimo sexto aniversario. Aunque hayan pasado los años, este título sigue siendo uno de los favoritos de los gamers. ¿Por qué?
Aunque su historia es muy simple, los niveles que debemos completar mantienen un cierto equilibrio. No son muy fáciles y tampoco extremadamente difíciles como para que abandones el juego, aunque hay ciertas zonas donde vas a querer hacerlo.
Los trucos también son algo característico de Super Mario Bros. Si llegaste a jugarlo, seguro recuerdas que, en ciertos niveles, existían atajos que te permitían saltearte varios mundos y de esta forma llegar a la princesa Peach más rápido.
El problema con tomar estos atajos es que el juego se terminaba en poco tiempo. A la mayoría de fans no les gustaba estos caminos secretos, ya que preferían disfrutar de la aventura completa, aunque eso le tome varias horas.
¿Qué había más allá del castillo?
Para completar un nivel (a excepción de los castillos de Bowser) era necesario tocar una bandera. Mientras más alto la agarraras, más puntos obtenías, por ese motivo, muchos tomaban carrera para llegar el asta.
Sin embargo, había ocasiones en la que tanta carrera tomabas que Mario terminaba saltando por encima de la bandera. Lastimosamente, no podías entrar al castillo; por lo que si querías pasar de nivel, tenías que volver y tocar la bandera.
También había la posibilidad de seguir de frente, el problema es que era un camino sin regreso. Esto debido a que no había nada adelante y como no podías retroceder el mapa, solo te quedaba esperar la muerte por límite de tiempo.