Epic Games, importante compañía dentro de la industria de los videojuegos, está envuelta en una batalla legal contra Apple desde hace unos meses por un tema que genera polémica desde que las transacciones en línea existen: las comisiones que cobran los dueños de las plataformas y tiendas digitales.
Ahora, la jueza Yvonne Gonzales Rogers advierte cómo el desenlace de esta batalla legal podría desembocar en grandes cambios que afectarían a otros agentes de la industria, precisamente a Sony, Microsoft y Xbox, que guardan ciertas similitudes en sus modelos de negocio con Apple.
La disputa entre Apple y Epic Games inició cuando esta última implementó su propio método de pago dentro de la aplicación para iPhone de Fortnite, algo expresamente prohibido por los de Cupertino.
En respuesta, Fortnite fue retirado de la tienda de aplicaciones oficial de iOS, afectando a millones de jugadores. El conflicto ha desplegado una serie de acusaciones entre ambas compañías con dardos ocasionales.
Sin embargo, la disputa se resume en que Epic Games considera que el 30% que cobra Apple a todos los desarrolladores de apps para iOS, es excesivo. Aun así, lo mismo sucede en otras plataformas como PlayStation, Xbox y Nintendo.
En este sentido, la jueza Gonzales advierte que si la demanda de Epic Games contra Apple prospera —y si esta se ve obligada a reducir ese 30%— este cambio se tendría que replicar en las tiendas digitales de las plataformas ya mencionadas, pues una regulación sería mandatoria.
Epic Games, por su parte, añadió durante el proceso que, si bien estas otras compañías también aplican el 30% que consideran excesivo, con el caso de los fabricantes de consola el acto estaría justificado, puesto que realizan una inversión significativa para crearlas y hasta las venden bajo pérdida. Para Apple, crear dispositivos móviles le resulta más barato relativamente.