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No, fotos con fajos de billetes no representan el precio de productos en Venezuela: son del 2018

Las imágenes, que están circulando bastante estos días, ponen montones de fajos de billetes junto a productos de primera necesidad, los cuales representan cuánto papel moneda se necesitaría para comprarlos. Sin embargo, estas fotos en realidad son de hace 4 años.

larepublica.pe
Foto: composición LR/ captura de Facebook

Se han viralizado en redes sociales publicaciones con fotos que presentan montones de billetes junto a productos básicos. La leyenda de estas fotos dice: “Un fotógrafo decidió mostrar cuántos bolívares (moneda venezolana) se necesitan para comprar lo esencial en Venezuela”. Los posts, en los que aparecen alimentos y productos como carne, papel higiénico, tomates, jabón, pañal, fideos, entre otros, al momento, suman más de 6.000 reacciones y han sido compartidos un número similar de veces. Sin embargo, la información no es actual. En realidad corresponde al 2018.

Las fotos son de Carlos Rawlins para Reuters en 2018

Hicimos una búsqueda reversa de las imágenes adjuntas. El carrusel fue usado en primer lugar en agosto del 2018 por distintos medios (1, 2, 3, 4) para ilustrar la noticia de que en Venezuela, ante la hiperinflación sufrida por el país, el régimen de Nicolás Maduro decidió cambiar la moneda, el bolívar, por una nueva: el bolívar soberano. Este nuevo billete redujo en ese momento cinco ceros a las denominaciones anteriores, es decir, se dividió entre 100.000. Las fotografías, tomadas por el fotógrafo venezolano Carlos García Rawlins para la agencia Reuters, daban cuenta de lo que hasta antes del cambio podían valer algunos productos.

Foto: captura de la web de BBC

La hiperinflación en Venezuela

Desde hace décadas, la economía venezolana registra aumentos en los precios de los productos de manera sostenida y en muchas ocasiones, exponencial. Según declara Henkel García, socio director de Econométrica, a El País, parte de este problema tiene que ver con el decaimiento de la producción nacional venezolana, que estaría fuertemente relacionado con las expropiaciones que hiciera Hugo Chávez en su mandato.

El especialista, además, sostiene que la política fiscal y monetaria ha estado bastante equivocada, pues ha forzado constantemente el aumento de precios sin basarse en el contexto económico y ha regulado las ganancias de las empresas. García pone como ejemplo esclarecedor el incremento de salario en 2018 que fue declarando Maduro, de aproximadamente 18.000%. El problema, según cuenta el analista, es que para afrontar ese aumento, había que emitir dinero conseguido de manera inorgánica.

Por su parte, Richar Obuchi, profesor de políticas públicas del Instituto de Estudios Superiores de Administración (IESA) de Venezuela, declaró a El Mundo, en 2016, que este fenómeno es consecuencia de un modelo de gestión de políticas públicas ineficiente, como la fijación arbitraria de precios. Además, señala el catedrático, que el Gobierno con distintas medidas ha alejado la inversión privada y disminuido la cantidad, calidad y diversidad de los bienes y servicios en la economía.

En conversación con Verificador, el exministro de Economía, Pedro Francke, señaló que las principales causas de este efecto son un fuerte desequilibrio externo, que ha causado una depreciación aguda de la moneda, así como un pésimo control del cambio. “La gente utiliza el cambio negro como la referencia para los precios y eso genera una espiral de la devaluación por la inflación”, comentó el economista.

De acuerdo a BBC Mundo, para que este fenómeno sea considerado como hiperinflación, el aumento mensual de los precios debe ser de más de 50%. Según el medio, el intervalo en el que sucedió esto en Venezuela va desde el último trimestre de 2017, en el que el país registró 56,7% en el incremento de precios hasta diciembre de 2020, con 77,5%.

Bloomberg, que toma como referencia el café con leche para calcular la devaluación de la moneda, calcula que entre mayo de 2018 y noviembre de 2020, este producto, bastante consumido en el país caribeño, pasó de costar 2,50 bolívares a 1.300.000. Como señala el diario El Orden Mundial, esto no quiere decir que se haya encarecido enormemente la bebida, sino que la devaluación de la moneda fue tanta que se necesitaba una denominación muy grande para comprar esto.

Foto: Álvaro Merino-EOM. Fuente: Bloomberg

Este problema ha hecho que en los últimos años, en dos oportunidades, el régimen madurista ponga nuevas monedas en circulación. El primer hito de este tipo fue, como ya contamos, en el 2018, cuando se reemplazó el bolívar por el bolívar soberano, quitando cinco ceros a las denominaciones.

El otro se registró en agosto del año pasado, cuando se introdujo el bolívar digital, que vale un millón de bolívares soberanos, moneda que sufrió un aumento de denominación bastante considerable desde el 2018. Actualmente, en Venezuela, ambas son válidas para hacer transacciones, junto con el dólar.

Foto: fuente en Venezuela

El fin de la hiperinflación

A inicios de este año, distintos medios reportaron que Venezuela ya no sucumbe ante el fenómeno de la hiperinflación, sino ante una que puede ser llamada como considerable o severa. Según la información, el país caribeño no reporta desde hace más de 12 meses una variación de precios mayor a 50%. Aun así, según la web de Datos Macro, es el segundo país con la mayor variación de IPC en el mundo.

De acuerdo a la BBC, el régimen venezolano ha aplicado una considerable reducción de gastos estatales, además de restricciones al crédito bancario e incentivos para que exista un menor gasto en bolívares y así mantener la estabilidad del tipo de cambio. Además, según el medio, dejó de subsidiar la gasolina, aflojó el control de precios y abrió el mercado cambiario.

Víctor Álvarez, exministro de industria de Venezuela, declaró a El País que entre las razones que él considera vitales para que haya ocurrido esto están que el Gobierno haya dejado de financiar el déficit de las empresas públicas a través de dinero sin respaldo, que haya ajustado las tarifas de las empresas estatales y de los servicios, y que se haya disminuido el gasto público Además, que se haya abierto la política comercial y permitido importaciones sin aranceles y demás gravámenes.

Tanto para Francke como para la BBC, el factor fundamental por el que la hiperinflación ha acabado es la dolarización de la economía venezolana. “La mayor parte de las transacciones parecen estar haciéndose en dólares, algo que suele suceder con fenómenos hiperinflacionarios. Entonces, simplemente se ha logrado un nuevo equilibrio de tal manera que la moneda no se está devaluando tanto”, señala el exministro.

Guillermo D. Olmo, ex corresponsal de BBC, comentaba a ese medio que ya a comienzos de 2021, se estimaba que más del 55% de las transacciones del país se hacen en esa moneda. Esto no significa que el gobierno haya decidido hacer oficial el dólar, sino que está regulando muchísimo menos su circulación y, por lo tanto, se ha hecho mucho más común su uso.

¿Cómo sería la representación actual usando el papel moneda vigente?

En Verificador, conversamos con una fuente confiable que radica en Venezuela, específicamente en Maracay, la capital del estado de Aragua, al oeste de Caracas, quien manifestó que si bien es verdad que la moneda nacional no ha sido muy estable a lo largo del tiempo, mucha de la información que corre sobre el país en el exterior es fatalista y distorsionada.

El contacto señaló que comparaciones como el viral mentado pueden ser engañosas y hasta ilógicas por los muchos cambios que ha sufrido el bolívar, y que la mejor manera de entender el cambio de precios allí es a través del dólar.

Nuestro contacto, por ejemplo, señala que un kilo de pollo actualmente vale 7.5 bolívares digitales o 7.500.000 bolívares soberanos, por lo que el ave fotografiada en el carrusel viral, que pesa 2,4 kilos, actualmente valdría 18 millones de bolívares soberanos (o 18 bolívares digitales o 3 dólares). En esa época, el producto costaba alrededor de 2,22 dólares.

Para resaltar el contraste entre las épocas, podemos recurrir a qué porcentaje del sueldo mínimo representaría el ave en mención. Así, en el 2018, fecha en la que se tomó la foto viral, este equivalía en el mercado paralelo, ajustado más a la realidad, a 1,30 dólares, según la web de la Deutsche Welle. Por lo tanto, el mes en que se tomaron las fotos difundidas en redes, un pollo entero podía costar casi el doble del salario mínimo. Actualmente, este pago ronda los 30 dólares, por lo que ahora el ave equivaldría a un décimo de este.

Cabe resaltar que el sueldo mínimo allá siempre ha estado acompañado de compensaciones. Así, en 2018, por ejemplo, existía el bono de alimentación, que incluso superaba por un poco el valor del sueldo mínimo. Ahora, según nuestro contacto, difícilmente lo que ganas es menor a cien dólares gracias a los distintos pagos extra que uno recibe.

De acuerdo a nuestra fuente y otras más que consultamos, el billete de menor denominación que tiene circulación efectiva el día de hoy son 500 mil bolívares soberanos. Asumiendo que cada fajo en las imágenes es de diez billetes, las fotos se verían de esta forma (los fajos que se han usado son los mismos de las fotos del 2018, en realidad, la figura que representa la denominación actual del bolívar soberano no es esa):

Foto: composición LR/ Carlos Rawlins-Reuters

Foto: composición LR/ Carlos Rawlins-Reuters

Foto: composición LR/ Carlos Rawlins-Reuters

Conclusión

Viral que muestra montones de fajos de billetes junto a productos de primera necesidad para afirmar que eso es lo que se necesita para comprar en Venezuela es engañoso. Las fotos adjuntas en realidad son del 2018. Hicimos el cálculo con el papel moneda de más baja denominación que circula en la actualidad y la comparación es muy distinta.

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