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Turismo

Huancabamba - Piura: ¿cuál es el misticismo de las lagunas de las Huaringas y por qué atrae a miles?

Llegar hasta este punto del norte del país es un pase libre para vincularse con un atractivo más allá del turismo. ¿De qué se trata?

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Huaringa proviene de la palabra aymara que significa Huari o líquido espeso. Foto: archivo del Instituto de Montaña

A 255 kilómetros de Piura y a 3.957 m. s. n. m., en las provincias de Huancabamba y Ayabaca, se ubica el conjunto de lagunas de las Huaringas. Este paraje, además de ser visualmente llamativo, es también un espacio concurrido por aquellos viajeros que desean recargarse de energías positivas. La temperatura de sus aguas, que oscila entre 5 °C a 7 °C, representa una fuente infalible para alejar los males.

Las figuras importantes encargadas de liderar este proceso de limpia son los famosos chamanes, quienes con medicina tradicional y a través de mesadas o baños posicionan al curanderismo como uno de los mayores atractivos de la provincia.

¿En qué consiste el misticismo de las lagunas de las Huaringas?

La RAE define al misticismo como la doctrina religiosa y filosófica que enseña la comunicación inmediata y directa entre las personas y la divinidad. En este contexto, el misticismo de las Huaringas está relacionado con la interacción entre el hombre, la naturaleza y una fuerza superior. Es decir, este punto es el escenario para realizar rituales que renuevan la suerte de quien los prueba a través de baños y del uso de elementos como piedras sagradas, aretes metálicos, conchas, espadas, cruces, preparados y varas de membrillo.

Pero su rasgo altamente místico se sostiene desde su nombre: la palabra ‘Huaringa’, según su origen, provendría de las palabras quechua “huari”, que significa baño, e “inga”, que hace alusión al “inca”. De ahí que su reputación de aguas encantadas se haya expandido por todo el territorio peruano.

¿Qué lagunas hay en las Huaringas?

De acuerdo con la información recogida en una lista del Ministerio de Cultura, el complejo de Las Huaringas está constituido por las siguientes lagunas:

  • Laguna La Negra: se le atribuyen poderes para curar enfermedades físicas como dolor de cabeza y problemas de la vista. Sin embargo, también suele ser utilizada para inducir algún daño o maleficio.
  • Laguna Shimbe o laguna Blanca: es la más extensa de las Huaringas y se alarga por las quebradas de los cerros aledaños, y tiene coloración turquesa claro por el reflejo del ichu, las gramíneas y las hierbas medicinales. Según los curanderos, esta laguna sirve para desatar toda enfermedad y para la buena ganadería.
  • Laguna del Carmen: su nombre se debe a que los curanderos de San Antonio y Salalá prepararon una pequeña gruta para la Virgen del Carmen. Sus propiedades se asocian con el alivio de enfermedades mentales y problemas de corazón.
  • Laguna del Toro: se la conoce con este nombre porque cuentan que durante algunas noches aparece un toro bramando con furia. Esta vinculación hace que los ganaderos eleven sus pagos en esta zona. Asimismo, se dice que sirve para deshechizar o ‘descontrapesar’ la brujería.
  • Laguna las Palanganas: se ubica en el punto más alto del cerro Negro y tiene la forma de una pequeña poza rectangular a manera de espejo de agua. Se caracteriza por exponer numerosas y multicolores ropas interiores en su alrededor, especialmente femeninas, por ser considerada especialista en los asuntos de amor y fertilidad. Hasta aquí llegan parejas jóvenes, mujeres infértiles y personas solteras.
  • Lagunas las Arrebiatadas: conforman varias lagunas sucesivas y unidas por desaguaderos y se cree que sus aguas sirven para atar parejas, propiciar fidelidad y resguardar la unidad.