Puede que el término bloatware no se te haga muy conocido, pero es muy probable que te hayas cruzado con el software al que hacen referencia, sobre todo si eres usuario de alguna laptop o PC de fabricante (prearmada). ¿A qué nos referimos? Pues a nada menos que a todos esos programas que vienen instalados de fábrica en una laptop con Windows 10 o Windows 11 y que, en muchos casos, no deseamos tener ahí. Hay una forma muy práctica de deshacerte de ellos y aquí te contaremos por qué deberías intentarlo.
Bloatware es uno de los muchos términos del argot informático para referirse a todo aquel programa o conjunto de programas que los fabricantes preinstalan en laptops o PC prearmadas para inflar (de allí el término ‘bloat’) la oferta. Esto no quiere decir que estos aplicativos sean necesariamente inservibles, pero no son imprescindibles para el correcto funcionamiento de un sistema.
En muchos casos, y en ofertas especializados como las laptops gamers, hay bloatware que sí puede resultar muy útil, como en el caso de los gestores de recursos. En otro tipo de ofertas, muchos de estos programas son apenas plataformas de tiendas que invitan a adquirir más productos, aplicaciones en periodos de prueba o hasta antivirus molestos que solo generan avisos recurrentes para renovar una suscripción.
Puede que tengas un problema o no con el bloatware, pero, en este caso, asumiremos que sí lo tienes y te enseñaremos una manera práctica para deshacerte de él sin ir desinstalando cada programa uno por uno. Solo debes seguir estos pasos prácticos desde Windows 10 o Windows 11.
Puedes crear también un punto de restauración, lo cual recomendamos en caso de accidentes (puede que desinstales sin querer alguna app crucial para el sistema).
Lo mejor de esta herramienta es que tardará apenas unos segundos en desinstalar todos los programas, por lo que no necesitarás hacer demasiados clics al momento de realizarse el proceso.