Ante la creciente preocupación colectiva desatada por la expansión del nuevo coronavirus en diversos países del mundo, se ha detectado la oferta de implementos médicos y un incremento de precios. Por ese motivo, Facebook anunció esta semana que prohibirán temporalmente los anuncios y las listas de comercio de máscaras médicas.
“Estamos monitoreando de cerca al COVID-19 y haremos las actualizaciones necesarias a nuestras políticas si vemos personas tratando de explotar esta emergencia de salud pública”, señaló Rob Leatherm, director de gestión de productos de Facebook. “Comenzaremos a implementar este cambio en los próximos días”.
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Adicionalmente, la compañía limitará los anuncios de productos médicos que promuevan falsamente curar o prevenir la enfermedad, así como todos aquellos que intenten crear un sentido de urgencia en torno a la situación, como sugerir entre los compradores potenciales que un artículo se encuentra con suministro limitado.
Estas medidas también están siendo replicadas en la plataforma de Instagram, en donde están trabajando por mantener “seguros e informados” a los usuarios. “Los suministros son cortos, los precios están altos y estamos en contra de las personas que explotan esta emergencia de salud pública”, manifestó Adam Mosseri, CEO de la red social.
Instagram está eliminando la información errónea nociva conocida sobre el coronavirus y está enviando las publicaciones “que pueden ser engañosas a nuestros socios de verificación de hechos para su revisión”. Asimismo, si los usuarios pulsan un hashtag relacionado con la enfermedad, se les mostrará recursos de la OMS, los Centros de Control y Prevención de Enfermedades y las autoridades locales de salud.
A principios de mes, la Organización Mundial de la Salud advirtió que el aumento de la demanda y el acaparamiento, a raíz del pánico suscitado en la población, ha provocado escasez de mascarillas faciales y otros equipos de protección para los trabajadores de salud, “poniendo en riesgo vidas por el nuevo coronavirus y otras enfermedades infecciosas”.
“La industria y los gobiernos deben actuar rápidamente para aumentar la oferta, aliviar las restricciones a la exportación y adoptar medidas para detener la especulación y el acaparamiento. No podemos detener COVID-19 sin proteger primero a los trabajadores de la salud”, señaló el dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.
La OMS notificó que “desde el comienzo del brote de COVID-19, los precios han subido. Las máscaras quirúrgicas se han multiplicado por seis, los respiradores N95 se han triplicado y las batas se han duplicado. Los suministros pueden tardar meses en entregarse y la manipulación del mercado está muy extendida”.
Por otro lado, Facebook también ha comenzado a restringir las visitas sociales en todas sus oficinas ubicadas en 35 países a fin de “reducir el riesgo para nuestros empleados”. La empresa ha cancelado su participación en varias conferencias y ha suspendido eventos propios como su Cumbre Global de Marketing y su conferencia anual para desarrolladores F8, como medida preventiva ante el brote de la enfermedad.