Por segunda vez, 278 trabajadores que ingresaron bajo el régimen CAS (Contratación Administrativa de Servicio), y que ahora gozan de contrato indeterminado, denunciaron que la Municipalidad Provincial de Chiclayo (MPCh) busca despedirlos de forma arbitraria.
El dirigente Carlos Esqueche manifestó que el proceso ya ha iniciado con la notificación de 20 trabajadores, a quienes se les ha dado cinco días de plazo para que respondan a los documentales enviados. Según el representante, los fundamentos que tiene la MPCh, como tardanzas o faltas, no tienen el sustento adecuado para anular los contratos.
"Una resolución administrativa no puede ir en contra de un Decreto Supremo. El viernes han iniciado las notificaciones. Esto ha comenzado por remesas, tratando de intimidar a los trabajadores, convirtiendo a la municipalidad en un ambiente donde no hay una paz laboral", manifestó Carlos Esqueche en diálogo con periodistas de La República.
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Para el martes 18 de julio se ha anunciado una nueva protesta en la plazuela Elías Aguirre. Los trabajadores CAS de la MPCh no descartan hacer más radicales sus manifestaciones si es que desde la comuna chiclayana no cesan estos actos administrativos.