La noche del martes 24 de enero, un grupo de 51 personas viajó a bordo de un bus de la empresa Tacna Turismo hacia Lima con el fin de sumarse a las protestas que demandan la renuncia de Dina Boluarte Zegarra. El traslado es enteramente financiado con los recursos provenientes de la colecta de dinero y víveres que se realizó durante varios días.
Cientos de personas se concentraron para despedir a los manifestantes. El viaje se retrasó tras los reclamos a la comisión organizadora por la recaudación. No se ponían de acuerdo de qué forma se distribuiría el dinero, se habló de una cuenta mancomunada, de entregar el dinero en mano o de depositarlo a través de cuentas Yape a cada viajero.
Las mujeres a cargo de la recaudación informaron sobre los distintos montos que lograron obtener en la colecta. Una detalló que recaudó 14.000, otra 55.000 y, finalmente, 9.000 soles, montos que sumaban 78.000 soles; sin embargo, una de las recaudadoras afirmó que no contaba con el dinero en mano, ya que lo guardó por precaución. Su declaración desató los reclamos y la reunión se tornó en caos por casi una hora.
Tras superar esta situación, se realizó el alquiler del bus por 12.000 soles. Toda la comitiva se trasladó al terminal nacional Manuel A. Odría, lo cual generó una nueva situación de desorden dado que reclamaban para que todos ingresaran al terminal. El personal a cargo y policías cerraron el lugar ante la aglomeración y desorden.
Finalmente, el bus partió luego de las 10.00 p. m., entre cantos y arengas. Se anunció que en las próximas horas viajarán más personas desde Tacna para participar de las protestas en Lima.