Como medida para evitar el incremento de contagios por la COVID-19, los cementerios El Ángel y Presbítero Maestro, ubicados en El Agustino, permanecerán cerrados al público el 1 y 2 de noviembre.
El subgerente de Negocios y Cooperación de la Beneficencia de Lima, Daniel Cáceda Guillen, aclaró que ambos camposantos solo atenderán los entierros y hasta un máximo de cinco personas por cada difunto.
“Para las cremaciones solo dos personas, en cumplimiento a las normativas que están vigentes”, declaró para Andina.
Asimismo, dijo que la Beneficencia no está permitiendo la presencia de comerciantes de alimentos o de flores en los exteriores ni interiores de ambos cementerios.
En esa línea, Cáceda informó que se están haciendo las coordinaciones respectivas para que los efectivos de la Policía Nacional y de los serenazgos de las municipalidades de Lima y El Agustino brinden la seguridad en los exteriores de ambos camposantos y eviten las aglomeraciones de personas.
Por otro lado, el subgerente no descartó la posibilidad de que el Museo del Presbítero Maestro comience a atender al público a partir de noviembre, pero que para ello se requiere de un protocolo especial, teniendo en cuenta que se trata de un cementerio.
“Queremos mantener todavía en proceso la aprobación de nuestro protocolo”, recalcó.
Finalmente, Cáceda explicó que antes del cierre del Presbítero Maestro, el público que iba a visitar a sus difuntos solo podía ingresar por la puerta 4, para lo cual dejaban su DNI e informaban a dónde se dirigían.
“En el caso de los turistas, el ingreso es por la puerta que da la estación del Metro de Lima. Ellos están con su boleto y los vigilantes los conocen”, manifestó.