Aunque algunos miembros del Gobierno se han mostrado preocupados por los fallecidos durante las protestas al interior del país debido al paro de transportistas y los conflictos sociales por la economía, el ministro del Interior, Alfonso Chávarry, no consideró que el Ejecutivo haya tenido responsabilidad alguna por la pérdida de vidas humanas, pese a que surgieron varias críticas por el mal manejo del Gobierno sobre la situación.
“La responsabilidad la tienen los manifestantes, los que realizan las manifestaciones y permiten que se infiltren en sus filas vándalos y delincuentes que atentan contra la propiedad privada y contra las personas”, declaró a la prensa.
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Como se informó, el pasado lunes 28 de marzo se dio inicio al paro de transportistas y las manifestaciones se extendieron por varias provincias del país y con el transcurso de los días, el nivel de violencia en las protestas incrementó, al punto de que se registraron víctimas mortales y heridos en Huánuco, Ica y Huancayo.
Las movilizaciones en Huancayo, Junín, llegaron a su punto más álgido luego de las desafortunadas declaraciones del mandatario Pedro Castillo, quien dejó entrever que las protestas de los gremios de transportistas, agricultores, comerciantes, entre otros, estaban motivadas por el dinero. Desde Piura, dijo que dichas personas habían sido pagadas para salir a las calles.
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El lunes 4 de abril, el presidente Pedro Castillo anunció toque de queda desde las 2.00 a. m. hasta las 11.00 p. m. para el martes 5 de abril con el objetivo de “salvaguardar la integridad” de las personas, pues tenía información de Inteligencia que ocurrirían ataques durante las manifestaciones.
Luego de más de una semana de enfrentamientos entre los civiles y miembros de la Policía, el jueves 7 de abril se llegó a un acuerdo con los colectiveros que protestaban, y el Ministerio de Transportes y Comunicaciones firmó un acta que legalizaba su uso en regiones.