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Política

Rocío Silva Santisteban: “Si Mariátegui estuviera vivo hoy en día, le dirían caviar”

La excongresista explicó que no considera al Gobierno de Pedro Castillo de izquierda. Alegó que esta corriente política no ha podido incorporar la reivindicación de los derechos de las mujeres.

Rocío Silva Santisteban. Foto: captura/LR+

En La Entrevista, Paola Ugaz conversó con Rocío Silva Santisteban. La excongresista de la República afirmó que la izquierda debería repensar el Perú con la ideología mariateguista, pero teniendo en cuenta los cambios políticos, sociales, económicos y hasta ambientales. Agregó que Perú Libre, partido que llevó a Pedro Castillo al poder, saldrá bastante perjudicado.

¿En qué momento se encuentra la izquierda peruana? ¿Hay autocríticas?

Hay varias autocríticas. En primer lugar, no creo que este Gobierno sea de izquierda, no creo que el presidente de la República, Pedro Castillo, sea un representante de una izquierda de tradición; más bien, me parece que es un genuino representante del pueblo, pero nacionalista popular con un propuesta progresista que lamentablemente no se puede ejecutar debido a un problema de carencias.

Más adelante lo que van a hacer es sacarnos en cara que el único Gobierno de izquierda fue un Gobierno completamente errado. Creo que en estos momentos la izquierda en el Perú debería repensar lo que ha implicado estar demasiado en el tema electoral y viendo mucho menos el trabajo con las bases, que es el trabajo básico de la izquierda, porque si la derecha tiene dinero para invertir en medios o propaganda, nosotros no tenemos nada, excepto la posibilidad de un trabajo coherente en bases. Como autocrítica, eso no lo hemos hecho, eso lo hizo un poco Perú Libre, también el Frente Amplio y Nuevo Perú. Perú Libre va a salir bastante magullado de este escenario.

¿Qué es la izquierda peruana?

La izquierda peruana ya no puede ser la izquierda jurásica, una izquierda ortodoxa que se quedó sin repensar lo que ha implicado el siglo 21; sino que la izquierda hoy en día tiene que ser feminista, luchar por los territorios, estar junto a la gente impactada por el extractivismo, que es el modelo imperante. Si no planteamos eso, un cuestionamiento al modelo, al uso de combustibles fósiles, entonces no aprendimos nada.

Perú Libre, Vladimir Cerrón se dice de izquierda, ¿cómo decir que que el líder y fundador del partido que llevó al poder a Castillo no es de izquierda?

No, yo sí creo que son de izquierda, pero es una izquierda ultratradicional, ortodoxa, bastante cuadriculada, no incorpora el tema de las mujeres, no les interesa. Básicamente, los liderazgos son masculinos, a los femeninos los limitan al masculino. Si Mariátegui estuviera vivo hoy en día, le dirían caviar. ¿Por qué? Porque Mariátegui era una persona que escribía sobre cine, psicoanálisis, opera, mujeres, feminismo, poesía. Con ese perfil era un caviar.

Mariátegui era un hombre de su tiempo. Lo que nosotros debemos hacer es repensar el Perú con esa metodología mariateguista.

Si no pensamos en la superviviencia de la especie humana cuestionando el modelo de desarrollo, cuya base principal es el consumo de combustibles fósiles, estamos mal. El modelo de Perú exportando piedras es lo que tenemos que cambiar, no podemos continuar con ese modelo.

Ahorita todo lo que no sea radical es caviar, ¿qué es ser caviar?

El concepto caviar es un significante sin significado. Puede significar cualquier cosa, es un significante vacío. Le das el contenido que te da la gana. Unos dicen que el caviar es alguien que ha trabajado en el Estado, los apristas han estado en el Estado todo el tiempo, entonces serían caviares. No hay definición. Es algo que se utiliza para descalificar.

Para un sector de la izquierda yo seré una caviar, pero para la derecha soy una terruca, una terrorista y me lo han dicho varias personas y hasta periodistas de Willax. Es relativo ¿qué es ser caviar?, ¿qué es terruquear?

¿Qué se puede hacer para respetar a la mujer seas del arco ideológico que seas?

Sin duda uno de los grandes problemas de la izquierda es que no ha podido incorporar la reivindicación de los derechos de las mujeres. Algo que sí hizo la izquierda boliviana, por ejemplo, fue una crítica profunda al patriarcado.

Pueden pasar los líderes, pero seguimos manteniendo esta idea de que los temas de las mujeres no importan, por eso Pedro Castillo cuando finalmente dijo que Héctor Valer se retiraba del premierato no lo cuestionó precisamente por lo que lo hemos cuestionado gran cantidad de peruanos, sino lo que hizo fue echarle la culpa al Congreso.

El tema de las mujeres parece que no le importa ni al presidente, no le importa tampoco a la presidenta del Congreso. Al final de todo su speech, ¿qué dijo? “No queremos más comunismo”, lo cual no es solo completamente desacertado, sino que mantiene un discurso absurdo. Acá no hay comunismo de ningún tipo. Héctor Valer subió al Congreso con López Aliaga, comunista nada.

Me parece que nos estamos olvidando de las cuestiones profundas en las cuales podríamos estar de acuerdo con los sectores con los que no estamos de acuerdo.

No se ve en el Congreso, en el Ejecutivo y tenemos un Tribunal Constitucional que tampoco pelea por los derechos de las mujeres. ¿En qué crees que se falló?

Todos hemos fallado en pensar, incluyéndome, que cambiando las políticas públicas se iban a cambiar las mentalidades. Tenemos que trabajar a un nivel mucho más profundo como la educación. Aquí también hay sectores ultraconservadores muy ignorantes que no saben, no precisan qué es el enfoque de género y no lo quieren porque va a “homosexualizar a sus hijos”, algo que es completamente ridículo.

Lo que nos ha faltado es discutir de una manera más técnica o pedagógica nuestro mensaje, que es la lucha por igualdad, derechos, para no retroceder, la lucha por la educación de las niñas, educación de calidad donde puedan tener un pensamiento crítico. Eso duele.