El Frente Popular Agrícola del Perú (Frepap) presentó, a fines de agosto, el proyecto de ley 6095 que establece medidas de protección para las mujeres gestantes y madres lactantes en el ámbito laboral durante la pandemia de la COVID-19.
Con esta medida se busca la modificación del artículo 1º de la Ley Nº28048 a favor de la protección de la mujer gestante que realiza labores que pongan en riesgo su salud y/o el desarrollo normal del embrión o el feto.
El último texto sustitutorio de esta iniciativa legislativa señaló que el objeto de la ley es que las embarazadas tengan la posibilidad de solicitar a su empleador la no realización de tareas que pongan en riesgo su salud o la del niño por nacer.
Cabe destacar que la persona tendrá que acreditar con un certificado médico que se encuentra en estado de gestación. Ante esta situación, el jefe deberá asignar otros trabajos a la gestante para que no se desarrollen complicaciones en su condición de salud. Esto, sin afectar sus derechos laborales.
Asimismo, por el estado de emergencia en que se encuentra el país, el empleador está obligado a designar el trabajo remoto tanto a mujeres encintas como a lactantes.
En caso de que no puedan cumplir con esta modalidad, durante la crisis sanitaria, se tendrá que otorgar licencia con goce de haber, aunque con recuperación posterior de horas de trabajo.
Modificación del Artículo 1º de la Ley 28048. Foto: Captura texto sustitutorio del proyecto de ley 6095.
La vocera titular del Frepap, María Teresa Céspedes, indicó que la importancia de este proyecto de ley recae en que las mujeres gestantes y madres lactantes deben ser protegidas de abusos laborales en el contexto de la pandemia.
“Las mujeres gestantes y madres lactantes pertenecen a grupos de mayor riesgo en esta pandemia. Por ello, se necesita implementar medidas específicas para su protección frente abusos que se puedan cometer y proteger la vida de los mas vulnerables”, explicó.
La medida garantizará el correcto desarrollo del feto y la no infección por COVID-19 de los niños menores de seis meses que requieren de lactancia exclusiva, señaló Céspedes.
Además, aclaró que el fiscalización del cumplimiento de la norma quedará a cargo de la Sunafil y que la licencia sin goce de haber será negociada para una compensación posterior.
“Si bien estamos en una crisis económica, sería más costoso si la persona por trabajar se infecta porque se infectarían ella y el infante, lo cual generaría que igual no pueda trabajar, pero serían dos seres expuestos. Ante la crisis sanitaria actual sería mucho más grave”, acotó.
Este lunes 7 de septiembre, durante la continuación de la sesión del ‘Pleno Mujer’, el proyecto de ley impulsado por la congresista Céspedes entró en debate y, finalmente, se aprobó en primera instancia con 118 votos a favor.
Por la necesidad de implementación de la norma, la presidenta de la Comisión de la Mujer, Carolina Lizárraga, solicitó la exoneración de la segunda elección, que se admitió con 120 votos.
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