Recibí la estupenda noticia de que gané una cena en el mejor restaurante del mundo (The World’s 50 Best 2023, peruano, por supuesto, Central, de Virgilio Martínez y Pía León), por haber tenido las proyecciones más acertadas entre 25 analistas convocados el año pasado por el SAE de Apoyo Consultoría en un cuestionario con preguntas sobre la política peruana en 2023. Pese a que, en esto de la futurología, la chiripa es, especialmente en la inestable política peruana, el factor crucial, me quedé pensando en qué puede ser útil para el oficio de la prospectiva. Aquí les resumo lo primero que se me ocurrió:
1. Más cerebro que corazón. Sacudirse la arrogancia e ilusión de que lo que uno desea es lo que sucederá. Yo quisiera que Alianza Lima gane la Copa Libertadores, pero nunca apostaría a eso. Chau wishful thinking.
2. La ideología es mala compañera en la futurología. Chau al partido.
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3. Uno nunca sabe todo. En cada tema siempre hay alguien con más conocimiento y experiencia. Mejor es saber quién sabe en cada tema que creerse el Leonardo da Vinci siglo XXI.
4. Uno nunca es el dueño de la verdad. Siempre puede haber un punto de vista distinto al nuestro que sea valioso.
5. Buscar información plural, inteligente y precisa es crucial para proyectar, aunque no nos guste lo que diga. No solo se debe leer al amigo, a la collera, o al que coincide, sino al que piensa distinto y hasta nos cae mal. Lenin dijo: “Es una verdad el que, con frecuencia, en política se aprende del enemigo”.
6. Pero sí es bueno distinguir y evitar a los papanatas y faroleros.
7. Las encuestas solo dicen lo que cree la mayoría, no lo que se debe hacer ni lo correcto ni lo que ocurrirá.
8. Todo es dinámico. Lo que era cierto antes, o algo que nunca sucedía, no tiene por qué ser así en el futuro.
9. Pero la historia bien evaluada es fuente inagotable para la futurología.
10. Los políticos mienten pues su oficio no es buscar la verdad, sino que las cosas ocurran. Sin paltas con eso, pero son predecibles. Tratar de entenderlos para saber cómo decidirán es clave.
11. Guiarse por las redes es absurdo pues están llenas de troles y de idiotas.
12. Tratar de proyectar el futuro es distinto que arreglar el país. Chau activistas, acólitos y salvadores de la patria.