Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos, conversó el pasado jueves con Vladimir Putin sobre el conflicto en Ucrania, según informa The Washington Post. Durante la llamada, el republicano pidió a Putin no intensificar la guerra en territorio ucraniano, en un intento por disminuir las tensiones entre Rusia y Occidente. Esta conversación marca el primer contacto entre Trump y el presidente ruso desde su victoria en las elecciones, en un contexto de creciente interés internacional por la postura que el futuro mandatario adoptará en el escenario global.
Donald Trump y Vladimir Putin han tenido una estrecha relación política. Foto: Alexei Nikolsky/Kremlin
La llamada, realizada desde el resort de Trump en Florida, se enfocó en la necesidad de promover la paz en Europa. Fuentes cercanas informaron que el expresidente manifestó su interés en una solución diplomática para el conflicto en Ucrania, recordando a Putin la considerable presencia militar de Estados Unidos en Europa. Sin embargo, Trump ha insinuado su apoyo a un acuerdo que permita a Rusia conservar parte de los territorios ocupados, una postura que ha suscitado reacciones variadas entre los aliados estadounidenses.
Durante la campaña presidencial, Trump afirmó que pondría fin a la guerra en Ucrania, aunque no dio detalles específicos sobre cómo lograría tal objetivo. En la conversación, el electo mandatario mencionó brevemente el tema territorial y sugirió que podría apoyar un acuerdo en el que Rusia conserve ciertos territorios ocupados.
El exmandatario también conversó con el presidente ucraniano Zelensky, generando inquietud en Kiev sobre el apoyo militar estadounidense, fundamental para la defensa contra el ejército ruso. Foto: AFP
Trump mantuvo recientemente una conversación con el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky en una llamada descrita como amistosa. Sin embargo, la relación entre ambos líderes presenta tensiones, especialmente debido a la postura del expresidente sobre la necesidad de financiamiento y apoyo militar continuo a Ucrania, que el magnate considera un alto costo para los contribuyentes estadounidenses. Esta posición genera inquietud en Kiev, donde se teme un cambio en el apoyo estadounidense.
Ucrania depende de miles de millones de dólares en ayuda mensual para defenderse del ejército ruso, más equipado y numeroso. Además, las recientes visitas de Zelensky a instalaciones estratégicas en Estados Unidos han sido interpretadas como maniobras políticas, lo que ha alimentado las críticas de los aliados republicanos de Trump.