El único país de Centroamérica que produce petróleo, que busca potenciarse junto a Estados Unidos y Rusia, está en problemas. Esta nación lleva años extrayendo petróleo del departamento de Petén, en especial del Campo Xan, una de sus principales fuentes de riqueza. No obstante, la prórroga del contrato que permite estas actividades podría no concretarse, lo que pondría en jaque tanto la industria como la estabilidad económica del país.
Esta industria generó más de $809 millones para su nación. No obstante, el Contrato 2-85 está próximo a expirar en 2025 y su renovación es incierta debido a complicaciones políticas y ambientales. Si no se prorroga, la región perdería su posición como productor de petróleo y dejaría de recibir millonarios ingresos que benefician tanto al gobierno central como a las comunidades locales.
Este país centroamericano produce mucho petróleo crudo, pero sus exportaciones bajaron un 50%. Foto: El Economista
En 2024, Guatemala sigue siendo el único país de Centroamérica que produce petróleo, y destaca dentro de la región por esta capacidad. La extracción de crudo se concentra en el Campo Xan, ubicado en el departamento de Petén. Esta operación permitió al país posicionarse como un actor singular en la producción de petróleo, algo que la diferencia del resto de los países centroamericanos que no cuentan con esta capacidad.
Aunque las reservas de Guatemala no son comparables con las de otros grandes actores del sector, su posición como productor único en Centroamérica le otorga una importancia geopolítica y económica. A pesar de que las inversiones realizadas gracias a los ingresos provenientes del petróleo son significativas, la durabilidad de esta fuente de ingresos depende en gran medida de la prolongación del acuerdo con Perenco, el cual actualmente se encuentra en dificultades legales y ambientales.
La extracción de petróleo crudo en Guatemala se concentra en el Campo Xan, ubicado en el departamento de Petén. Foto: Prensa Libre
El impacto del petróleo en la economía de Guatemala fue significativo, especialmente en términos de ingresos fiscales y empleo. Desde el inicio de las operaciones en el Campo Xan, la producción de crudo generó más de US$809 millones para el Estado. Este flujo de recursos fue crucial para diversas inversiones públicas, además de contribuir a la estabilidad económica del país.
Sin embargo, el futuro de esta contribución está en entredicho. La posible no renovación del contrato de explotación pondría en riesgo los ingresos del Estado y el empleo de miles de personas vinculadas directa e indirectamente con la industria. Además, las comunidades en las cercanías del Campo Xan dependen de estos recursos para el desarrollo local. El fin de las operaciones podría tener repercusiones devastadoras para estas áreas, aumentando la pobreza y reduciendo las oportunidades económicas.
El objetivo de Guatemala de convertirse en una potencia petrolera junto a Estados Unidos y Rusia es ambicioso, aunque enfrenta desafíos considerables. Mientras que estas dos potencias mundiales cuentan con grandes recursos y tecnologías avanzadas para la extracción y refinación de petróleo, la nación centroamericana depende en gran medida de la extensión del contrato con Perenco para continuar sus operaciones en el Campo Xan. La esperanza de posicionarse junto a estas naciones reside en la posibilidad de atraer más inversiones extranjeras y de modernizar su infraestructura energética.
A pesar de los obstáculos, Guatemala sigue explorando nuevas oportunidades en el sector energético. Las autoridades del Ministerio de Energía y Minas estiman que, si el contrato con Perenco se extiende hasta 2045, el Estado podría recibir US$165,3 millones adicionales, incluidos US$38,6 millones en regalías. Estos ingresos podrían utilizarse para mejorar la infraestructura nacional y aumentar la capacidad de producción del país, acercándolo más a su objetivo de ser una potencia petrolera.
Estados Unidos continúa siendo el líder de la producción de petróleo en todo el mundo. Foto: CDN
A nivel mundial, la producción de petróleo está dominada por varias naciones que poseen vastos recursos y una capacidad tecnológica superior. En 2024, Estados Unidos continúa siendo el líder mundial, con una producción diaria de 19,63 millones de barriles. Este país es seguido por Rusia, con 13,65 millones de barriles diarios, y Arabia Saudita, con 9,02 millones de barriles.
El top 10 de productores de petróleo en 2024 es el siguiente: