El Gobierno de Estambul anunció este sábado que más de 50.000 alumnos de 93 escuelas de la ciudad serán transferidos, a partir del próximo lunes, a otros centros educativos en edificios construidos a prueba de terremotos.
La medida se adopta 13 días después de que dos fuertes terremotos, de 7.7 y 7.6 grados de magnitud, asolaran el sureste de Turquía y el norte de Siria, respectivamente, dejando más de 45.000 muertos y decenas de miles de edificios derrumbados.
Los expertos vienen advirtiendo desde hace años que Estambul, la mayor urbe de Turquía, puede sufrir en cualquier momento un devastador sismo.
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"A partir del lunes 20 de febrero de 2023, nuestros estudiantes de 93 escuelas e instituciones educativas en (edificios en) riesgo serán transferidos a escuelas a prueba de terremotos", anunció la Oficina del Gobernador de Estambul en un comunicado.
De esta forma, "51.995 estudiantes y 2.765 profesores" deberán cambiar de colegio y continuar su educación en las escuelas construidas con una tecnología especial para resistir a los temblores de la tierra, precisa la nota.
El plan incluye la demolición de 76 escuelas, mientras que otras 17 serán reformadas y reforzadas.
Según el servicio de emergencias Afad, el número de víctimas mortales de los terremotos registrados hasta ahora en Turquía asciende a 40.642, pero aún quedan decenas de miles bajo los escombros de los edificios destruidos, por lo que se prevé que siga subiendo de forma significativa.
Unas 430.000 personas han sido evacuadas hasta ahora por las autoridades turcas, indicó Afad.
Esta catástrofe humanitaria, considerada el peor desastre que sufre la región en más de un siglo, ha desatado una virulenta discusión por la falta de construcciones específicas para soportar seísmo, y ha hecho sonar la alarma, especialmente en Estambul.
Los datos oficiales indican que en la ciudad del Bósforo hay más de 1 millón de edificios, de los que, según los expertos, 250.000 se derrumbarían en caso de un terremoto de magnitud 7.5, mientras que otros 91.810 sufrirían daños graves o muy graves, y más de 167.000 quedarían con perjuicios de mediana dimensión.