Las autoridades de Egipto han dejado en libertad a un turista de Estados Unidos que fue detenido por fotografiarse frente a las pirámides de Guiza con las nalgas al aire, un nuevo episodio de posados controvertidos ante esa maravilla de la humanidad que traen de cabeza a los responsables arqueológicos del país.
Si a finales del año pasado un pareja de daneses se grabaron desnudos en pose sexual encima de la pirámide de Keops, ahora un extranjero, del que hasta el momento no se han dado datos, ha sido el que ha querido hacerse una foto bajándose los pantalones, lo que ha enfadado a las autoridades de Egipto.
El viajero se aventuró el sábado a mostrar su trasero en el espacio que alberga las tres pirámides de Keops, Kefrén y Micerinos a las afueras de El Cairo, para capturar una instantánea histórica un tanto atípica, confirmó a Efe una fuente de seguridad que pidió el anonimato.
El hombre no llevaba pasaporte cuando fue descubierto por trabajadores de la zona arqueológica y estaba, aparentemente, bajo los efectos de alguna sustancia que afectaba a su comportamiento.
El turista de Estados Unidos ha sido investigado por “atentar contra la moral pública”, afirmó la fuente, pero ha quedado en libertad menos de 24 horas después.
La Fiscalía del sur de Guiza, donde se ubican las pirámides, ha decidido liberar al turista y una acompañante que viajaba con él, después del pago de 5.000 libras egipcias (unos 300 dólares) cada uno, tal y como anunció en un comunicado.
Los detenidos estaban acompañados a la salida de comisaría por un representante de la Embajada de Estados Unidos y podrán ahora abandonar el país de los faraones, según la fuente de seguridad.
Fuente: EFE