La Bolsa de Valores en Lima cerró sus operaciones con todos los indicadores en negativo. Así, el índice S&P/BVL Perú General, el más representativo, bajó 1,86% hasta los 27.989,42 puntos. Esto después de que la Bolsa japonesa despertara con la caída del Nikkei en 12,4%, siendo su peor jornada desde 1987.
Enrique Díaz, economista de la PUCP y exgerente del BCRP, destaca que el comportamiento del mercado bursátil de Japón no solamente respondería al temor por la desaceleración en Estados Unidos -después de registrar una subida de 4,3% en la cifra de desempleo- sino también a la decisión de subir su tasa de interés.
“Recientemente, el Banco Central de Japón elevó su tasa y muchos han tratado de retirar sus inversiones. Esta salida masiva de Japón, junto con la percepción de la posible recesión en EE.UU. ha creado un ambiente negativo en todo el mundo”, detalla.
En Europa, Fluidra y Acciona lideraron los recortes en la Bolsa española. Esto, a su vez, impulsó la caída en 3% del Ibex, principal índice español y Wall Street registró un decrecimiento de hasta un 6,3% en el caso del Nasdaq, mientras el índice Dow Jones bajó un 2,7%. Asimismo, el Dax alemán, el Cac francés y el Mib italiano bajaron más del 2%. Por su parte, el mercado cripto registró una de sus peores jornadas, mientras que el bitcoin cotizó por debajo de los US$60.000 y volvió a niveles de febrero, con una caída la última semana de más de 20%.
Para el economista Eduardo Recoba, el comportamiento de los mercados bursátiles globales no es una sorpresa, puesto que estos “asumen conductas de manada” y se preveía que Perú no sería la excepción.
“Es una ola tipo tsunami, primero empieza por Asia, va pasando por Europa y termina en EE.UU. Eso finalmente golpea al resto de los mercados sean o no de economías industrializadas”, explica Recoba.
No obstante, hace hincapié en que si bien las bolsas regionales pueden verse también afectadas, estas “no son termómetro de nada sino mercados para élites” y si Perú o Chile presentan resultados negativos podría deberse principalmente a una variación del precio del cobre. Las Bolsas grandes en América Latina, como México o Brasil sí serían las más golpeadas.
Bajo esa misma premisa, tanto Eduardo Recoba, como Jaime Aritio, Gerente Comercial de Renta4 SAB, resaltan que normalmente la Bolsa peruana no sigue una correlación tan directa con la Bolsa norteamericana o japonesa sino más bien con lo que sucede en China porque tenemos una bolsa minera.
“El bajo crecimiento del PBI en China (4,7%) ha estado castigando también algunos activos de riesgo. Esto, sumado a los datos de desempleo en EE.UU. explica los resultados negativos de la Bolsa de Lima”, señala Aritio.
Recoba hace énfasis en que no habría por qué usar la palabra pánico ya que todo se resumiría en un nerviosismo propio de los mercados bursátiles.
“A diferencia de 2008 o 2020 tenemos datos. Sabemos que el empleo no agrícola no era el esperado (114k plazas vs 175k estimadas a julio) y que la inflación todavía no llega al rango meta de la Fed, pero está la cancha más dibujada para bajar las tasas en setiembre”, acota.
Así, se ha incrementado la probabilidad al 82% que se realice un recorte de tasas para la próxima reunión de la Fed en setiembre, esperando una reducción de 25pbs. Mientras tanto, Aritio señala que este mercado nervioso aún podría abaratar un poco el dólar.
Por su parte, Juan Carlos Ocampo, docente de la facultad de Negocios de la Universidad Privada del Norte, destaca que hay que estar atentos a las medidas que vaya a tomar el Banco Central Europeo.
"Es muy importante este actor. Si ellos también, de alguna forma, pueden reducir la tasa de referencia ayudarían a calmar los mercados, más allá de alguna u otra medida que permita reducir la cifra de desempleo en EE.UU.", sostiene Ocampo.
Asimismo, asegura que sería anticipado pronosticar cómo se desenvolverían las Bolsas. En ese sentido, habría que esperar las decisiones que tome tanto la Reserva Federal de EE.UU., como los demás agentes del mercado, invitando a los distintos actores que cotizan en la Bolsa a mantener la calma.