Pese a un mayor volumen de toneladas exportadas en los cuatro primeros meses del año, el valor de envíos de cobre peruano sigue en franco descenso debido a una caída de su cotización en el mercado internacional, explicada en buena parte por la poca confianza en la recuperación del mercado chino.
En el comparativo frente al periodo enero-abril del 2023, nuestro país despachó un total de 814.000 toneladas del metal rojo por US$6.388 millones, un 0,9% menos en valor que las 735.800 toneladas por US$6.449 millones registradas un año atrás. Es decir, pese a que en el primer cuatrimestre se exportaron 10,6% más toneladas de cobre, se obtuvo casi un punto porcentual menos de ingresos por el factor precios.
Y es una caída sostenida. Según el Ministerio de Energía y Minas (Minem) en su Boletín Estadístico Minero, el precio promedio del cobre en la Bolsa de Metales de Londres (LME) fue de poco más de 373 centavos de dólar por libra en mayo, 9,3% menos que en enero y 6,8% menos que el cierre del 2022.
No es un trance que atraviese únicamente la minería peruana. En Chile, primer abastecedor mundial del metal rojo, la caída de su cotización depreció la moneda local en aquel mes.
Diego Macera, director del Instituto Peruano de Economía (IPE), explica que, con niveles cercanos a los US$4 por libra, el cobre mantiene una alta cotización frente a los últimos 10 años, y más aún en los últimos 20, cuando rozaba el US$1 libra.
“Hay que recordar que los precios de la mayoría de commodities han ido cayendo, tanto alimentos como metales y energías. Esa tendencia a la baja a nivel local explica parte de la caída de inflación en el Perú y el mundo en los últimos meses, y el cobre no es ajeno”, grafica.
En este sentido, refiere que el principal factor de mercado para explicar este bajón en la demanda son las débiles perspectivas de la economía de China —primer consumidor global, destino del 70% de las exportaciones de cobre peruano—, que han sido más bajas de lo esperado.
Con todo, la situación podría mejorar. Todo depende de que los nuevos precios al alza se encuentren, en los próximos meses, con un mercado cuprífero fuerte a nivel local, explica.
Hasta abril del 2023, las transferencias de recursos generados por la actividad minera, que incluyen el canon, regalías (legales y contractuales), derecho de vigencia y penalidad, sumaron más de S/3.018 millones.
El presidente de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), Víctor Gobitz, reconoce que ingresan menos recursos a regiones cuando cae el cobre, pues la rentabilidad y pago de impuestos —de donde sale el 50% del canon— también lo hacen. No obstante, aclara que ningún fondo de inversión pública se verá afectado en el corto plazo, pues subsisten mecanismos de apalancamiento asociados a la baja ejecución.
“No es que las regiones reciban el canon y lo gasten al 100%. El promedio no pasa del 60% y tienen la suerte de contar con rezagos acumulados que terminan siendo una especie de fondo de estabilización”, refiere.
La actividad del cobre es el principal producto exportado del sector minero en el país. Foto: AFP
Según cifras preliminares del Reporte Mensual de Comercio (RMC) del Mincetur —que recoge data oficial de la Sunat, pero cuyos resultados no muestran un registro certero de embarques asignados—, los despachos de cobre en mayo alcanzaron los US$1.868 millones FOB, 37,4% más que en similar mes del año previo.
Ello, sin embargo, hace presagiar que las cifras oficiales que muestre el Minem en las próximas semanas sigan esta misma tendencia al alza, tanto en producción como exportación, apalancadas por el aporte de Quellaveco, que inició operaciones en la segunda mitad del 2022.
El cobre se mantiene como el principal producto exportado del sector minero, con una participación de 31,1% del total de envíos.
Infografía - La República