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Economía

Latinoamérica continúa siendo la región con mayor desigualdad de ingresos en el mundo

Las altas diferencias sociales y el bajo acceso a la educación ocasiona precarias condiciones laborales para los jóvenes. Esta insuficiencia de oportunidades se ha mantenido por 30 años en la región. 

larepublica.pe
En el Perú, el estancamiento profesional asciende al 35%, uno de los mayores del mundo. Foto: Andina

De acuerdo con el último informe presentado por el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), América Latina es la región con mayor desigualdad de ingresos en todo el mundo, condición que se mantiene por 30 años. 

"La falta de acceso a la formación de capital humano, empleos de calidad y la inclusión financiera son factores claves que perpetúan la desigualdad entre generaciones en América Latina y el Caribe", apuntó el CAF mediante un comunicado, en el que también destacó que el "origen familiar" es uno de los elementos fundamentales para las opciones de progreso de una persona.

A detalle, en el reporte "Desigualdades heredadas: el rol de las habilidades, el empleo y la riqueza en las oportunidades de las nuevas generaciones", se explica que el 30% de los jóvenes latinoamericanos comparten el mismo puesto ocupacional que sus padres.

En el Perú, el porcentaje de estancamiento profesional asciende al 35%, uno de los mayores del mundo, según Dolores de la Mata, economista de CAF.

Falta de acceso 

El informe manifiesta también que, debido a las diferencias sociales y la poca educación recibida en sus primeros años de vida, los ciudadanos poseen menos habilidades laborales, lo que empeora sus futuras condiciones de trabajo.

"Las brechas se profundizan y se evidencian en menores salarios y otros resultados laborales", indicó el estudio, que concluye que las oportunidades de empleo no son iguales para personas con el mismo nivel educativo, pero provenientes de diferentes contextos socioeconómicos y familiares.

Por su parte, Verónica Frisancho, gerente de Conocimiento de CAF, resaltó que las brechas de género en movilidad educativa se han revertido en el tiempo y ahora están en favor de las mujeres, especialmente en educación universitaria.

Asimismo, precisó que estos cambios son necesarios para una mayor movilidad social, pero no son suficientes para alterar las posibilidades de progreso laboral entre hombres y mujeres en la región latinoamericana.