Mediante un comunicado, la organización del Torneo Clásico de Kooyong (Australia) acordó en cancelar, por segunda vez consecutiva, el evento debido los problemas generados por la pandemia y las medidas sanitarias que se necesitan para celebrar un evento masivo de tenis como tal. Este acontecimiento sucede antes del inicio del Open de Australia.
Adam Cossar, presidente del torneo, precisó cuáles fueron las causas principales de la cancelación del evento y manifestó la imposibilidad de ofrecer un evento seguro. “Con la gran incertidumbre de los últimos meses sobre las normas que estarán vigentes en enero, no ha sido posible hacer los mejores planes para ofrecer el mejor y más seguro evento deportivo, así como la mejor experiencia para los jugadores, espectadores, patrocinadores, comunicadores, miembros y personal del evento”, declaró Cossar.
Otra hipótesis que manejan desde en la prensa internacional es que la vacunación contra la COVID-19 de algunos participantes es el problema. Por ejemplo, Novak Djokovic no se encuentra inoculado y al parecer no lo piensa hacer. Como el caso del serbio hay mucho más.
Por su parte, el primer ministro Dan Andrews, autoridad donde se disputará el Abierto, indicó que quiere que todos los tenistas estén completamente vacunados. ”Todas las personas que están viendo el tenis en el Abierto de Australia van a tener las dos dosis, todas las personas que trabajen allí van a tener la pauta completa”, declaró Dan Andrews a la radio pública.
El 2021 vendría ser el segundo año consecutivo que la organización cancela el torneo de exhibición que se celebra desde 1988 en Australia y que muchos jugadores utilizan como preparación para el primer Grand Slam de la temporada, el Open de Australia.
Asimismo, aún siguen en lista en el calendario otros torneos previos al Abierto de Australia, que de igual manera tendrán lugar en el país oceánico, como el Torneo Brisbane o el de Sídney. Todo esto viene después de la polémica que se está generando con las vacunas y las condiciones que deberán vivir los tenistas o vacunados en el Open de Australia, ya que se les obligará a hacer una cuarentena, mientras que a los vacunados esa exigencia no se les impondrá.