Christian Llalli, un joven egresado de la carrera profesional de Ingeniería Ambiental de la Universidad Nacional José María Arguedas (UNAJMA), en Apurímac, con tan solo 24 años, se convirtió en el primer estudiante de su alma máter en fundar un centro de investigación científica. Gracias a una beca del Programa Nacional de Becas y Crédito Educativo (Pronabec), pudo culminar sus estudios, pero eso no le bastó, pues decidió impulsar el tema investigativo en su universidad, que hoy en día se dedica a estudiar iniciativas centradas en la contaminación ambiental de su región.
En esta entrevista para La República, te contamos la inspiradora historia de este joven andahuaylino y cómo logró convertirse en el impulsor de la investigación en la UNAJMA.
Christian Llalli tenía un objetivo claro y, desde adolescente, se dedicó completamente a los estudios y estuvo al tanto de las becas, por lo que no dudó en aplicar al Pronabec.
"Con un esfuerzo bastante trabajoso, que he venido construyendo desde que estuve en el colegio, cuando me enteré de las becas que otorgaba el Estado como es la Beca 18, me he esmerado bastante y ocupado los primeros lugares y a raíz de eso fue que me presenté a las convocatorias que cada año de la Beca 18 y fue ganador de una vacante para la UNAJMA", remarcó.
Debido a su situación económica, el joven, quien tiene más de 10 hermanos, sabía que debía buscar alternativas para poder pagarse los estudios, ya que su familia tenía otros gastos.
Christian Llalli desde adolescente tenía mente estudiar algún tipo de ingeniería. Foto: Pronabec
"Mis padres se dedican a la agricultura aquí, en Andahuaylas, son agricultores y somos 12 hermanos. Soy el octavo de los 12. (Mis padres) se dedican a la producción de tubérculos, como es la papa, la oca, la mashua y algunos granos andinos. (…) La economía familiar no me favorecía, entonces, yo buscaba alternativas para poder, quizás, lograr mi sueño de ser profesional y fue así que vi los medios y vi que el Estado ofrecía becas. Entonces, apunté por ahí, me esforcé y lo conseguí", señaló.
Lalli no se dedicó solo a estudiar, pues al ver que su casa de estudios tenía deficiencia en el área investigativa, decidió tomar acciones al respecto.
"Cuando estuve en el primer semestre, segundo semestre, veía la carencia de hacer investigación en la universidad y solo habían círculos de investigación que, lamentablemente, no tenían sostenibilidad en el tiempo. Y como también mi carrera era nueva aquí en la región, entonces no había esos espacios donde quizás nosotros podamos ahondar más en hacer investigación científica", indicó
Es así que tuvo la idea de fundar el primer centro de investigación, y con ayuda de los estudiantes y especialistas, constituyó este laboratorio.
La Universidad Nacional José María Arguedas fue fundada el 1 de noviembre de 2004. Foto: UNAJMA
"Se trató de conformar con estudiantes, hacer invitaciones a profesionales también para que nos puedan asesorar un poco en la materia. Y fue así como hemos ido constituyendo un centro de investigación. Se hizo un proyecto de creación con actas de constitución y demás requisito. (…) Se presentó documentos a las autoridades de la universidad. Tras varias insistencias fue aceptado la creación de un centro de investigación que es la primera en mi universidad", sentenció.
Aunque no se logró tener un apoyo económico del Estado para crear este departamento de investigación, el joven lo hizo una realidad a fines de 2020.
"Viendo esas potencialidades que tenía la universidad, que son infraestructura, laboratorios de especialidad y docentes investigadores, sumado a las deficiencias ambientales, así como los problemas ambientales que tiene mi región, viendo esas necesidades, fue que se ha creado el centro de investigación", remarcó.
Han pasado casi tres años desde que Christian logró constituir el primer laboratorio de su universidad, y aunque hoy en día es un miembro externo y está dedicado a realizar otros objetivos, siempre se hace un tiempo para asesorar a otros jóvenes.
"Ahora lo que se está haciendo en el laboratorio de investigación es usar recursos naturales que existen en esta zona para darles un valor agregado, pero se enfoca más en lo que es contaminación ambiental, o sea, el problema de la contaminación ambiental está ahí. Lo que nosotros hacemos es usar algunos recursos que están en nuestra zona y emplearlos para poder descontaminar, ya sea en fuentes de agua como también el suelo y en el aire", detalló.
Christian Llalli ahora se encuentra desarrollando su tesis. Foto: Pronabec
El ingeniero ambiental andahuaylino afirma que todos tienen el poder de lograr sus sueños si se esfuerzan, más aún cuando estos proyectos sirven para mejorar nuestro país.
"Las oportunidades están ahí, solo es cuestión de que ellos se esmeren, se esfuercen y que estén al tanto, quizás de la de las convocatorias que brinda el Pronabec y estudien, porque solo de ellos dependerá los resultados que podrían tener en su vida. Además, indicarles también a los jóvenes de que siempre podemos hacer algo nuevo por nuestra sociedad y que mejor aún siendo estudiantes y profesionales con vocación de servicio", finalizó.