La motosierra es una herramienta muy utilizada en la carpintería para cortar diversos tipos de madera; sin embargo, aunque pueda ser sorpresivo, este no fue siempre el objetivo principal de sus creadores en el siglo XIX.
En realidad, su fin estuvo más vinculado a la medicina. No obstante, el uso de este aparato resultaba contraproducente, ya que, si bien facilitaba las cosas, también causaba un daño importante a las pacientes que eran intervenidas con él. Por eso, se le encontraron nueva formas de uso.
A finales del siglo XVIII fueron creadas las primeras motosierras con la finalidad de cortar huesos y para la sinfisiotomía, es decir, el corte de los cartílagos de la pelvis para abrir la cadera, algo que era muy útil para situaciones como partos complicados, que eran muy frecuentes por aquella época.
Aunque parezca difícil de creer, los primeros usos de la motosierra fueron para la medicina. Foto: Quora
Cuando un bebé nace con las piernas por delante, puede quedarse atascado en el canal del parto, lo cual puede ser muy riesgoso para él y su madre.
La sinfisiotomía con motosierra, en la que se dividía en dos el cartílago de la sínfisis púbica, era una alternativa para los casos en que no podía practicarse una cesárea.
La sínfisis púbica era el cartílago que se cortaba con las primeras motosierras. Foto: Musculoskeletal Physioterapy Australia
John Aitken, un médico escocés, fue el primero en idear lo que llamó la “sierra flexible”, que consistía en una cadena de eslabones serrados montada en dos mangos de madera y accionada con una manivela.
El galeno describió el objeto en su obra “Principios de partería” o “Medicina puerperal” de 1785. Poco después, otro prototipo de motosierra fue lanzado por otro médico escocés, James Jeffrey, con la intención de hacer escisiones en los huesos enfermos.
El osteótomo de Heine con las palancas que ayudaban a maniobrarlo. Foto: Van Leest Antiques
En 1830, el ortopedista alemán Bernhard Heine creó un modelo más cercano al de las motosierras de madera, al que llamó ‘osteótomo’, es decir, “cortador de huesos” en griego, lo cual indicaba su función.
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El uso de la motosierra en la cirugía fue muy popular durante el siglo XIX, pero no tardó en traer inconvenientes, pues causaba complicaciones en las pacientes. Con el paso del tiempo, surgieron intervenciones más eficaces y su utilización con este fin ya había desaparecido de Europa para la mitad del siglo XX.
Como se evidenció en mujeres de Irlanda sometidas a sinfisiotomía como forma de violencia obstétrica entre 1944 y 1987, las secuelas que dejaba el procedimiento incluían dolor crónico, dificultad para caminar, incontinencia y problemas sexuales. En cuanto al empleo de la motosierra para el corte de huesos en amputaciones, fue gradualmente desplazado por la mucho más efectiva sierra de Gigli, según explica el portal Xataka.
Al ver que se podía cortar algo tan duro como un hueso con una motosierra, no tardó en descubrirse su utilidad para cortar la madera. En 1905, el estadounidense Samuel J. Bens obtuvo la primera patente de una sierra utilizada para talar árboles.
La motosierra de Bens fue la primera patentada para cortar árboles. Foto: OddFeed
El ingeniero canadiense James Shand desarrolló la primera motosierra portátil en 1918, y su invento fue hecha por la empresa alemana Festo en los años 30.
James Shand desarrolló la primera motosierra portátil en 1918 bajo el sello de Festo. Foro: Festo
En la actualidad, el uso de la motosierra en medicina no está prohibido. Sucede que este instrumento se utiliza en intervenciones bastante excepcionales.