Laura Rodríguez Dulanto fue una de las mujeres en hacer historia en el Perú luego de concretar el sueño más importante de su vida al defender uno de los derechos fundamentales de toda persona: estudiar. En ese entonces, en el país, a las féminas no se les permitía desarrollarse profesionalmente; sin embargo, ella deslumbró con su dedicación e inteligencia desde su etapa escolar.
La oriunda de Barranca empezó a prepararse para la universidad con los apuntes de su hermano mayor, quien estudió la profesión médica. Años más tarde, Laura Rodríguez ingresó a la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) y se graduó como la primera médica cirujana. Te contamos quién fue y por qué es recordada en la medicina peruana.
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María Laura Esther Rodríguez Dulanto nació en Supe, Barranca. Tras unos años, su familia decidió trasladarse a Lima, donde estudió primaria. Uno de sus planes era cursar secundaria porque sentía curiosidad por los temas abordados en esa etapa escolar.
Dada la nula oportunidad de estudiar, la adolescente esperaba en casa a su hermano Abraham para tomar sus apuntes y alimentar sus conocimientos escolares, ya que solo a los varones se les concedía este derecho. Así, gracias a su plan, Rodríguez Dulanto cumplió su objetivo.
Luego de su esfuerzo y dedicación, los padres de Laura Rodríguez consiguieron que un jurado especial de la Dirección de Instrucción la evaluara cada cierto tiempo y terminaron aprobándola con una nota sobresaliente. A pesar de la inexistencia de colegios y universidades para mujeres, ella soñaba en convertirse en la primera médica del Perú.
En mayo de 1892, la joven a sus 19 años logró ingresar a la Facultad de Ciencias de la Universidad Mayor de San Marcos con una calificación de 20, el cual marcó un hecho histórico en el país y en la lucha de los derechos de la mujer en el Perú y Latinoamérica.
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Dos años después, Laura Rodríguez Dulanto decidió matricularse en la Facultad de Medicina. No obstante, tuvo dificultades para llegar a ser una profesional, puesto que en los cursos de anatomía, ella se ocultaba detrás de un biombo porque no se les permitía a las féminas ver cuerpos desnudos.
Laura Esther Rodríguez Dulanto primero se graduó en la Facultad de Ciencias de San Marcos. Foto: Colegio Médico del Perú/YouTube
En el tercer año de su carrera, la universitaria destacó gracias a sus buenas calificaciones y recibió una autorización del decano de la Facultad de Medicina para que, por fin, pueda efectuar necropsias en una sala especial, pero acompañada de su hermano Abraham, quien también estudiaba la misma profesión y, años más tarde, se convirtió en ministro de Hacienda en el Gobierno de Augusto Leguía.
Su desenvolvimiento en la universidad fue tema de discusión en la sociedad e, incluso, llegó a ser debatido en el Congreso de la República, que anunciaron un dictamen en 1895 para ofrecerle un subsidio equivalente a 40 soles por su buen desempeño hasta finalizar la carrera.
Laura Esther Rodríguez Dulanto junto a sus alumnas en el hospital Santa Ana. Foto: Heroínas
En 1898, obtuvo el grado de doctora en Ciencias; pero siguió sus estudios de Medicina y, en 1899, logró convertirse en bachiller. Un año después, recibió el título de Médico Cirujano y pasó a ser la primera mujer en Perú en realizar el juramento de ética que exige la carrera.
Luego de recibirse como médica, Rodríguez Dulanto se especializó en ginecología. En 1910, donó un equipo de cirugía para la inauguración del Hospital Militar, mientras efectuaba investigaciones sobre la tuberculosis. Además, organizó una Escuela de Enfermería, donde se desempeñó como docente de Anatomía, Fisiología e Higiene, facilitándole a sus estudiantes prácticas en los nosocomios Dos de Mayo y Santa Ana, el cual ahora es el Arzobispo Loayza.
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Tras luchar contra una enfermedad, Laura Esther Rodríguez Dulanto murió a los 46 años y fue sepultada en el cementerio Presbítero Maestro de Lima. No obstante, su trayectoria sigue siendo recordado en su natal Supe, donde existe un hospital con su nombre.