El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, lanzó este lunes 18 de abril un plan de nacionalización del litio, tras la exclusión de empresas privadas en las explotaciones del mineral.
Pero, ¿qué es el litio y por qué ha empezado a tener relevancia? Este elemento lo podemos encontrar en las computadoras, celulares, medicamentos y hasta en los autos.
El Modelo de gobernanza del litio en México, un documento elaborado por el Congreso mexicano, lo define como un elemento químico que se puede encontrar en la naturaleza bajo la forma de sales o minerales, y se caracteriza por su color blanco-plata.
En tanto, la Universidad Autónoma Nacional de México (UNAM) lo clasifica como un metal alcalino que tiene propiedades físicas y químicas, lo que lo convierte en un elemento básico para numerosas aplicaciones de alto nivel tecnológico en el universo de las telecomunicaciones, industrias aeronáuticas y espaciales.
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Su importancia radica en su capacidad de almacenar y transferir una gran cantidad de energía, una característica que explica su relevancia para el uso industrial. Estas atribuciones fueron descubiertas en la década de 1990, con la producción de baterías recargables.
Debido a su auge con las innovaciones tecnológicas como la industria de los celulares y autos eléctricos, al litio se le ha denominado el nuevo oro blanco por avizorarse como un posible reemplazo del petróleo.
Australia, Estados Unidos, Chile, Argentina, Bolivia y México, que tiene yacimientos de litio en Sonora, Chihuahua, Baja California, Zacatecas, Jalisco y Puebla; son los principales países con reservas del litio en el mundo.
Gonzalo Monroy, consultor del sector energético, indicó en entrevista con TV Azteca que en México tiene cinco concesiones de litio, tres de ellas están inactivas; dos están en fase de exploración y, según las estimaciones, el país estaría en el décimo lugar a nivel mundial en cuanto a cantidad del mineral en el subsuelo.