El transporte de mascotas en viajes interprovinciales cada vez es más frecuente, lo que refleja el fuerte lazo que une a las personas con sus animales. Sin embargo, esta tendencia ha suscitado inquietudes sobre la seguridad de los animales y la responsabilidad que asumen las empresas de transporte. Por ello, es fundamental que los pasajeros se adhieran a las normativas establecidas para garantizar así un viaje sin contratiempos para todos los involucrados.
Hasta momento, solo una empresa de transporte terrestre permite que una mascota viaje en cabina junto con su dueño. Para adquirir la compra de un boleto de viaje para esa mascota, sea perro o gato, deberás tener en cuenta que el pasajero debe presentar una solicitud y dar su consentimiento.
También es obligatorio que el dueño compre un boleto adicional para la mascota, de acuerdo con las tarifas y asientos asignados y tipo de servicio. Este boleto incluye el derecho a transportar 20 kg de equipaje en bodega, mientras que el asiento elegido para la mascota debe estar junto a la ventana y al lado del dueño.
Entre las empresas de transporte terrestre, Civa es una de las que permite viajar con mascotas en bus. Este servicio debe solicitarse de forma presencial en cualquiera de sus agencias a nivel nacional o llamando al 01 4181111, opción 1, hasta 24 horas antes de la salida del bus.
Por otro lado, en la empresa Cruz del Sur no está permitido transportar mascotas en el salón o bodega del bus. Sin embargo, se hacen excepciones para perros guía que acompañen a pasajeros con discapacidad visual.
La empresa Civa establece ciertos requisitos para que las mascotas puedan viajar en bus junto a sus dueños. Estos son:
La normativa peruana sobre el transporte de mascotas está regulada por el Código de Protección y Defensa del Consumidor, el cual exige a los proveedores de servicios garantizar la calidad e idoneidad del transporte, asegurando un viaje seguro para los animales.
Esto implica ofrecer un espacio adecuado, ventilación y un entorno controlado que preserve el bienestar del animal durante el trayecto. El incumplimiento de estas disposiciones puede ser considerado una falta de diligencia y responsabilidad, lo que podría acarrear sanciones por parte de entidades reguladoras como Indecopi.