La tradicional Cuaresma empieza este 17 de febrero y dura 40 días, periodo en el que los creyentes deben meditar y reflexionar sobre los malos actos que pueden haber cometido y empezar un cambio.
Se busca que hagan penitencia para que puedan acercarse a Dios y redimirse. En la siguiente nota, conoce más detalles de esta celebración y qué es lo que se acostumbra hacer en estas fechas.
La Cuaresma en una temporada de reflexión y penitencia para la iglesia occidental. Comienza el Miércoles de Ceniza, seis semanas antes de las celebraciones de Pascua, y culmina el Sábado Santo. Durante esta significativa fecha, el cura realiza el rito de poner una cruz de ceniza en la frente de los creyentes.
Se trata de un periodo de oración para los católicos del mundo. El color litúrgico simbólico de este periodo es el morado que significa luto y penitencia.
La Cuaresma dura 40 días y es un tiempo para prepararse para la llegada de la Pascua. Comienza este 17 de febrero y termina el próximo 3 de abril.
Durante esta celebración la Iglesia pide algunos sacrificios. El primero es el ayuno para las personas de 18 a 59 años. Segundo la abstinencia, es decir, no comer carne todos los viernes de cuaresma.
Muchas personas abandonan algunas actividades placenteras como ver la televisión y le dan más horas a la oración. Así también, es una costumbre participar en actos de caridad.
La Iglesia considera a la Cuaresma un tiempo de expiación, en el que los creyentes pueden arrepentirse de sus pecados y buscar cambiar para vivir más cerca de Cristo.
Estas fechas son importantes para que las personas puedan fortalecer su fe a través de la reflexión y la oración.
Las personas deben evitar comer carne el Miércoles de Ceniza y el Viernes Santo. La razón es que la carne roja representa el cuerpo de Cristo crucificado; por eso, algunos prefieren reemplazarlo por pescado, a fin de hacer referencia a la multiplicación de peces de Jesucristo.
La Cuaresma se basa en el símbolo del número cuarenta en la Biblia que hace alusión a varios episodios históricos. Entre ellos los cuarenta días del diluvio, los cuarenta años de la marcha del pueblo judío y los cuarenta días que Jesús pasó en el desierto, rezando y sin comer antes de salir a predicar y empezar su vida pública.
Al final de la cuaresma se celebra la Semana Santa que inicia el Domingo de Ramos, ese día Jesús entró a Jerusalén, donde todo el pueblo lo recibió en medio de alabanzas y dádivas, Durante estas fechas se recuerda la pasión y muerte de Jesús.