
Eduardo González Viaña es dueño de una prolífica y saludada obra literaria. Su pluma ha transitado por el periodismo, la novela y el cuento, lo cual le ha deparado no pocos lectores, quienes siempre están atentos a su producción. No extraña: González Viaña es autor de casi 60 libros. Desde la década pasada, González Viaña viene publicando una serie de novelas sobre escritores peruanos, veamos: Vallejo en los infiernos (2012), Kutimuy, Garcilaso (2021) y Kachkaniraqmi, Arguedas (2023). En este 2025, el también columnista de Cultura de La República (sus artículos salen todos los jueves), publica su novela dedicada a la figura de Ciro Alegría: El ancho mundo (Ediciones Achawata), La República conversa con Eduardo González Viaña.
- Eduardo, mucha gente te estima y valora tu obra. ¿Qué es más importante que el reconocimiento?
- Pienso en el mayor reconocimiento que he recibido, me lo dio mi madre. Cuando me haces esa pregunta, me veo pequeño escuchando a la maestra de kindergarden mientras hablaba con mamá: “Lo siento, doña Mercedes. No creo que Eduardito llegue a aprender a leer. Hasta ahora no pasa de la letra che… Pero no se preocupe, podrá trabajar en el fundo de arroz de su padre. O, incluso, podrá llegar a general y a presidente como lo hizo el general Odría”. Mamá no se inmutó. Me llevó a casa e inventó su propio método de alfabetización. Puso cartelitos a las cosas: MESA a la mesa, SILLA a la silla y MAR al mar que se extendía frente a la ventana de nuestra casa. Centenares de pequeños papeles como esos me enseñaron a leer en algo así como un mes y desde entonces, me paso la vida tratando de aprender a escribir.
-Tu nueva novela sobre Ciro Alegría, ¿es una deuda personal?
- Creo que sí. Lo conocí cuando trababa en Expreso. Ciro Alegría, diputado por entonces, llegaba al diario semanalmente para coordinar con el dibujante que hacía una historieta con El mundo es ancho y ajeno. Al lado, estaba mi escritorio, y él se acercó y me preguntó de sopetón: ¿Viene usted de Trujillo? ¿Cómo lo sabe? Señaló con el dedo el periódico que yo tenía sobre la mesa. Era Norte. Me lo habían enviado mis amigos de allá. Alegría recorrió las páginas del tabloide y encontró un artículo mío. Felizmente, yo había terminado mis tareas. Hablamos de nuestra Alma Mater, de los intelectuales de su época, y sobre todo de Antenor Orrego y de César Vallejo, quien fuera su profesor de primaria. Conocía la historia del hombre que hablaba conmigo. Admiraba su coraje durante la revolución popular de 1932. Me maravillaba que hubiera podido escribir incluso en la cárcel cuando estaba condenado a muerte. “Si usted tiene una obsesión, ¡escriba!”, me dijo.
-¿Este es el tiempo para (re)leer a Ciro Alegría? Ha estado oculto.
- Oculto, sí. Deliberadamente, tontamente. Idiotamente. Es el momento en que el Perú debe otra vez y muchas veces tratar de reconocerse. Ganadora de un premio internacional y publicada en 1941, la novela El mundo es ancho y ajeno significaría el primer ingreso de la figura del indio en la literatura peruana y sería la primera obra de un autor peruano editada en casi todos los idiomas. Antes de que ella apareciera, los indios no habían sido considerados dignos de entrar en las páginas todavía coloniales de los autores peruanos.
"El ancho mundo". Ediciones Achawata.
-Si El mundo es ancho y ajeno no iba por Chile al famoso concurso de Farrar & Rinehart de 1941, la resonancia de la novela iba a ser mínima.
- Pienso en la mezquindad de los organismos que representaban al Perú. No aceptaron enviar los trabajos de Alegría ni de Arguedas porque sus puntos de vista no concordaban con el gobierno de turno. Enviaron el libro de otro escritor cuyo nombre no ha pasado al olvido porque siempre estuvo allí.
-La oralidad es parte de tu poética y esta novela no es ajena a ella.
- La literatura más reveladora del Perú ha nacido de la literatura oral. No pensemos solamente en los autores contemporáneos sino en aquel que inventó nuestro mundo, Garcilaso de la Vega y en los cronistas. El Perú de verdad se encuentra en los labios de nuestros campesinos, de nuestra gente de la calle, con sus peculiares acentos.
-Siempre he pensado en Ciro Alegría como un autor aventurero. Su vida fue rocambolesca. Tenía un carácter especial.
- Tuvo una vida difícil. Por razón de sus ideas, padeció cárcel y estuvo a punto de recibir la pena de muerte. Más que en su carácter, pienso en el Perú, y me parece espantable que a sus mayores escritores, como Vallejo, Alegría y Arguedas, se les haya castigado por sus ideas.
-¿Qué te sorprendió más de su vida?
- Su vida literaria comenzó en una cárcel. En la cárcel, Ciro Alegría soñó con una comunidad y con un líder campesino que algún día iban a revelar al mundo la verdadera imagen del Perú. En El mundo es ancho y ajeno, los indios de una comunidad andina tienen que afrontar la invasión de sus tierras por el latifundista a quien protegen las fuerzas armadas y las leyes de la república. Solo una tremenda resistencia ancestral hará que la comunidad india persevere en su lucha. “Me moría de ganas de salir de allí para escribir esa novela”, me dijo veinte años más tarde cuando nos conocimos.
-Eduardo, últimamente estás imparable. ¿A qué se debe?
-Fui uno de los primeros peruanos en caer con el COVID. Pasé 18 días en una clínica. 18 de los 20 pacientes de mi piso murieron. Ya no sé cuántos peruanos tuvieron esa mala suerte. Entonces pensé que, si sobrevivía, iba a hacer todo el tiempo lo que más me gusta o sea escribir. Desde entonces, he publicado una novela cada año y pienso seguir haciéndolo. Estoy presentado El ancho mundo y ya comencé otra novela.

CINEPLANET: 2 entradas 2D + 2 bebidas grandes + Pop corn gigante. Lunes a Domingo
PRECIO
S/ 47.90
ALMUERZO O CENA BUFFET + Postre + 1 Ice tea de Hierba luisa en sus 4 LOCALES
PRECIO
S/ 85.90
CINEMARK: Entrada 2D - opción a combo (Validación ONLINE o mostrando tu celular)
PRECIO
S/ 10.90
PERULANDIA: 1 Entrada +Vale de 30 soles + bosque encantado + piscinas + Perusaurus en Huachipa
PRECIO
S/ 49.90