Al interior del Palacio de Bellas Artes de México, y luego de causar violencia y atacar intempestivamente a miembros de la comunidad LGBT por oponer resistencia a la censura de una pintura, los manifestantes de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA) y la Central Independiente de Obreros Agrícolas y Campesinos (CIOAC) se fueron del lugar.
Desde el martes por la mañana, los campesinos de la UNTA y el CIOAC se atrincheraron en la sede de Bellas Artes y reclamaron que se retire el cuadro pintado por Fabián Cháirez. En ella, aparece un hombre desnudo con tacones y sombrero que hace alusión al líder revolucionario; los insultos, amenazas y golpes no se hicieron esperar en el Palacio.
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A pesar de que los campesinos detuvieron las agresiones, Álvaro López Ríos -líder de los manifestantes- aseguró que regresarán todos los días para alzar su voz de protesta con la finalidad de detener exposiciones, funciones y presencia de visitantes en el Palacio de Bellas Artes.
“Es una pintura que ofende y agrede. Vamos a venir diario a protestar y a cerrar este Palacio que fue hecho para la aristocracia y no para el pueblo. Todos los mexicanos deben de indignarse con este tipo dizque de obras”, aseveró López Ríos.
En el Palacio de Bellas Artes fueron agredidos física y verbalmente cinco integrantes de la comunidad LGBT y tres periodistas, entre ellos se encontraba Antonio Díaz, reportero de El Universal. Después de lanzar una botella de agua a uno de los jóvenes, López Ríos dijo que lo hizo porque se lo merecía, y que ellos no estaban incitando a la violencia.
El Palacio de Bellas Artes anunció la cancelación de la conferencia “Concibiendo la exposición Emiliano. Zapata después de Zapata”. Por el momento, los campesinos cumplieron parcialmente su cometido.