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Cine y series

“Al fondo hay sitio” y sus escenas más hot: cinco historias de amor, pasión y traición

¡Mucho 'Chiquitingo'! Estas escenas de "Al fondo hay sitio" sorprendieron al público por ser tan acaloradas y atrevidas.

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Conoce cinco escenas eróticas en “Al fondo hay sitio” que sorprendieron a fans. Foto: composición LR/América TV

“Al fondo hay sitio” es una serie de comedia, pero la ficción de América TV también suele tener varios momentos eróticos de vez en cuando. Así lo demostraron las recientes secuencias en las que Diego Montalbán y Claudia Llanos se van juntos a la cama o en la que Remo le roba un beso a Jenny sin saber que se trata de Jimmy. Por ello, en esta nota hacemos un repaso de cinco escenas en las que los personajes de Las Lomas no pudieron controlar sus más intensos deseos y recurrieron al chiquitingo.

Charo y Koky

Aunque terminaron recientemente su matrimonio, lo cierto es que Charo y Koky tuvieron más de un momento pasional. El más atrevido de ellos fue posiblemente cuando se reconciliaron luego de una grave pelea y, durante la noche, despertaron a todos los vecinos de Las Nuevas Lomas con peculiares sonidos.

Joel y Fernanda

‘El niño pez’ no solo es el que creó la palabra ‘chiquitingo’, sino también fue el que más quiso ponerla en práctica junto con Fernanda. Aunque en una ocasión, Joel no estuvo inspirado. En otra, no pudieron resistir las ganas de entregarse amor y tuvieron relaciones en la oficina de Nicolás.

Alessia y Jimmy

La tensión que hubo entre Alessia y Jimmy por mucho tiempo se fue acumulando hasta terminar en un apasionado, largo y nada inocente beso durante la noche de navidad. Se querían tanto que hasta olvidaron que tenían pareja... ¡pobres Remo y Kimberly!

Francesca y Carlos Cabrera

‘La Noni’ no se queda atrás en este top y una de sus parejas más pícaras fue Carlos Cabrera. El lado romántico de la ‘Noni’ y la elegancia del cubano apodado ‘Doctor Churro’ regalaron más de una escena erótica.

Tito y Teresa

Una de las parejas más olvidadas, pero posiblemente la que más chiquitingo tuvo. Las caderas de la Teresita encantaron a Tito, quien no se pudo resistir en más de una ocasión a querer tener un momento de acción con la hermana de su mejor amigo.