Lucas Huaranca es un docente jubilado de 65 años que actúa en la película Transformers 7, el despertar de las bestias. Huaranca encarna al curaca Amaru, un poblador del ande que custodiaba una llave hacia otros mundos.
La República conversó con Lucas. Este aseguró que obtuvo el papel por una coincidencia. Corría julio de 2021. Huaranca se dirigía al santuario del Señor de Qoyllurit'i, en la provincia de Quispicanchi. En el trayecto, una mujer lo abordó y le preguntó si conocía actores. Él se ofreció y preguntó si podía participar en el casting". La producción necesitaba un personaje con sus características que sepa hablar quechua. Además de sus tareas de docente el profesor tiene una trayectoria artística en su tierra.
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Forma parte de una comparsa de baile, dirigió la banda de músicos de su colegio y suele actuar en varias actividades. En cuanto a cómo fue su experiencia con los actores de la película, detalló que siempre tuvieron un trato cordial. "Ahora ya no tengo comunicación, pero me gustaría ver si hay otra oportunidad", aseveró.
En su actuación, Lucas revaloró el quechua y, a través de un mensaje en el idioma originario, sostuvo: "Yo les estoy invitando a todos los jóvenes y docentes a aprender quechua para que tengan la oportunidad que yo he tenido". Lucas Huaranca permaneció 36 años en el magisterio y tuvo que cesar a los 65 años como dicta la ley, pero aseguró que tenía ganas de seguir trabajando, como ahora se puede comprobar en su forma de hablar y ver la vida, con esas ganas de aprender y conocer más del cine.
Agregó que ahora lo llaman "profesor Amaru" y que tiene una cevichería en Urcos que es visitada por todos los fanáticos de la saga. Comentó que se tomará fotos y firmará autógrafos con los que vayan.
"Transformers: rise of the beasts” se grabó en Cusco y Tarapoto. Foto: composición de Álvaro Lozano/La República/Paramount Pictures
La película “Transformers: el despertar de las bestias” generó gran expectativa en el Perú. Para la séptima entrega de la saga Transformes se utilizó locaciones en las regiones de Cusco y San Martín, lo cual permitió mostrar al mundo la belleza de nuestra arquitectura histórica, como es la ciudadela de Machu Picchu y el templo ceremonial inca Sacsayhuamán.