Marvel Studios volvió a las salas de cine, esta vez con Black Widow, película protagonizada por Scarlett Johansson y Florence Pugh. Con su estreno, seguidores retoman la Fase 4 del Universo Cinematográfico de Marvel.
Dado que Avengers: endgame no ofreció un espacio para rendir tributo al personaje de Natasha Romanoff, su cinta en solitario no solo la despedirá por todo lo alto, sino que indagará en su pasado, su formación como espía y qué pasó con su familia real.
Gracias a estas escenas es que vimos la llegada de Ever Anderson, hija de Milla Jovovich, al UCM. Si eres de los que ya vio Black Widow, habrás notado que al principio se nos presenta la infancia de Natasha Romanov y Yelena Belova junto a Alexei Shostakov (Red guardian) y Melina Vostokoff.
La felicidad de esta ‘familia’ es interrumpida por agentes de SHIELD, que llegan a su casa para capturarlos tras el robo de información por parte de Shostakov. Tras escapar y llegar a Cuba, Dreykov, el jefe de los agentes encubiertos, hace que Romanoff (Anderson) y Belova pasen por la Sala roja para recibir entrenamiento y ser unas espías de élite.
Con Ever Anderson como una actriz nueva en Hollywood, la joven ya tiene un próximo proyecto para la gran pantalla: dará vida a Wendy en la película live action de Peter Pan que alista Disney para el 2022.
Natasha Romanoff, también conocida como Black Widow, confronta las partes más oscuras de su historia cuando aparece una conspiración peligrosa con vínculos de su pasado.
Perseguida por una fuerza que no va a detenerse por nada hasta acabar con ella, deberá lidiar con su antigua vida como espía y sus relaciones rotas de antes de que se convirtiera en una Vengadora. Para esto, contará con la ayuda de viejos aliados: Yelena Belova, su ‘hermana’, y Alexei Shostakov, Guardián rojo.