Las personas que tenemos perros en nuestros hogares sabemos cuándo nuestras mascotas ladran para demandar atención o para alertarnos de personas o animales extraños. Pero, quizás hayas notado que, algunas veces, sin haber ningún elemento distractor u objetivo aparente de por medio, los canes comienzan a ladrar a “la nada”.
Muchos creen que estos ladridos inexplicables anticipan terremotos o sugieren la presencia de fantasmas, pero no hay evidencia científica concreta sobre ello.
Para conocer por qué los perros tienen dicha actitud, La República conversó con Marisol León, etóloga (especialista en conducta animal) y docente en la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad Científica del Sur (UCSUR).
¿Alguna vez te has preguntado por qué tus perritos ladran sin ningún motivo aparente, como si ladrasen a la nada? En esta nota te lo contamos. Foto: USA TODAY
Según la Dra. León, los ladridos inexplicables pueden ocurrir en dos casos distintos: uno normal y otro anómalo.
“Si hablamos de una situación normal, debemos recordar que los perros tienen una audición 3 veces más potente que la de los humanos, entonces pueden responder a sonidos que son imperceptibles para nosotros”, comenta.
Cuando sucede eso, uno se puede dar cuenta por la intensidad de su ladrido o por la dirección de su mirada. Sin embargo, la situación anómala es distinta.
“Al igual que los humanos, algunos perros también tienen desorden neurológico que alteran su comportamiento”, por ejemplo, sus ladridos, señala.
“Esos perros que miran o ladran a la nada, que persiguen sombras o que se muerden la cola pueden padecer un desorden neurológico”, añade. En otras palabras, “es como si estuviera alucinaciones. En un plano más humano, es como un comportamiento esquizofrénico”, nos explica León, quien es médico veterinaria en la institución PsicoCan, donde atiende a perros con problemas de comportamiento.
Los perros pueden ladrar a la "nada" ya sea porque perciben sonidos que los humanos no o porque padecen de problemas neurológicos. Foto: My Cedar Crest
En estos casos de ladridos inexplicables por razones neurológicas, señala la especialista, las mascotas, después de que se les haya descartado un trastorno psicomotor o hipersensibilidad al sonido, deben ser tratadas con fármacos al nivel del sistema nervioso central u otros medicamentos que hagan que su convivencia con los humanos sea más llevadera.
Si bien resulta difícil saber cómo calmar los ladridos inexplicables de los perros sanos ya que no percibimos cuáles son los estímulos que lo causan, los expertos recomiendan algunos tips.
Según el instructor canino Humberto Campaña, en diálogo con La República, “para controlar los ladridos de la nada de nuestras mascotas primero debemos sacarlos a pasear 3 veces al día en el parque para que así descargue toda la energía que tienen acumulada cuando están dentro de casa”. Del mismo modo, se recomienda que “perciban a través de su olfato venteando y rastreando los diferentes olores y los diferentes sonidos que hay en el ambiente y sobre todo que socialice con canes”.
Por último, el dueño debe saber “que no debe reforzar con premios o estímulos cuando el perro ladra a la nada”.
De acuerdo con la Dra. León, por condiciones genéticas, el primero en la lista de razas caninas con más predisposición a problemas neurológicos, siempre será el bull terrier y el jack rusell. Sin embargo, los perros chuscos, aquellos sin raza definida, también lo pueden padecer por herencia de genes.
Claro está, precisa la médico veterinaria, que se trata de un 3% o 5% de la población de dichas razas caninas, nunca del 50%.