La semana pasada, un equipo de investigadores de la Universidad de Sydney anunció la reaparición de una cucaracha que come madera en Australia después de casi 90 años. Sin embargo, cuando la noticia fue rebotada por medios en español, se dijo que la especie era “carnívora”.
La confusión tiene su raíz en una traducción errónea del comunicado de prensa de la institución: el texto dice “wood-eating cockroach”, que significa “cucaracha comedora de madera”. Pero Google, por razones que desconocemos, lo traduce automáticamente como “cucaracha carnívora”.
Lo cierto es que esta especie es menos terrorífica, pero no menos fascinante. Y se pone mejor si analizamos el reciente hallazgo.
La cucaracha encontrada, cuyo nombre científico es Panesthia lata, es exclusiva de la isla Lord Howe (Australia) y se creía extinta desde la década de 1930.
El reciente hallazgo se produjo en julio de 2022, cuando Maxim Adams, estudiante de la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad de Sydney, avistó una colonia entera de ellas bajo una roca al pie de un árbol de higuera de Bengala, en la playa North Bay de la isla mencionada.
Maxim Adams junto al árbol de higuera donde encontró a la cucaracha Panesthia lata. Foto: Nicholas Carlile / DPE
Las P. lata miden entre 2,2 y 4 cm de largo. Tienen un color de cuerpo metálico que varía de rojizo a negro. Llevan microorganismos especializados en su interior que les ayudan a digerir la celulosa de la madera.
Su presencia es clave para el ecosistema de la isla Lord Howe, ya que actúan como recicladores de nutrientes. Sus hábitos alimenticios aceleran la descomposición de los troncos y, a su vez, sirven como fuente de alimento para otras especies.
Se pensaba que la P. lata se había extinguido tras la llegada de las ratas a la isla en 1918. En las siguientes décadas, se descubrieron poblaciones de parientes cercanos.
No obstante, la colonia recién descubierta es genéticamente diferente de esas poblaciones.
De hecho, los científicos observaron signos de haberse adaptado para sobrevivir, ya que antes no se las veía debajo de rocas.
Nicholas Carlile, investigador que exploró la isla junto a Adams, dijo que estas cucarachas redescubiertas podrían haber evolucionado para esconderse más eficientemente del Lord Howe woodhen, un ave terrestre de la isla.
A este fenómeno también le llaman coevolución entre presa y depredador.
“Ahora creemos que son más una ‘cucaracha de roca’”, señaló Carlile.
“Todavía hay mucho que aprender”, indicó Nathan Lo, profesor de Adams. “Esperamos estudiar su hábitat, comportamiento y genética y aprender más sobre cómo lograron sobrevivir, a través de más experimentos en la isla”, agregó.